La Peña Alba, en el
valle del Silencio, sirve como referencia natural para la localización del bello
caserío de
Peñalba de Santiago. Sus amontonadas
casas, cubiertas de pizarra y
piedra, escalonadas hacia el valle, forman un modelo inigualable de
arquitectura popular bien conservada. Balconadas de madera en forma de corredor y el ambiente
medieval que se percibe parece ser obra también de la misma
naturaleza y no construcción del hombre.