¿Alguien recuerda a aquel chico alto y muy bien presentado que trabajaba en el cine de actor secundario o extra, y que era de Cornombre o Manzaneda?. Le encantaba tomar siempre un campano en Casa Sandalio. Cuando llegaba de Madrid al Castillo, toda la chavalería acudíamos a contemplarlo cómo a un ídolo o semidios. Era muy amable con nosotros y después de empinar el vaso de vino, nos contaba la última película que había rodado.
Mensaje
Me gusta
No