FERMI y LOLA merecen un capítulo aparte. Os puedo asegurar que están llenas de un vitalidad muy, muy positiva. Bueno… Qué os voy a decir que no sepáis ya!
Deseosas de expandir la alegría y de empujar la raya del horizonte más allá de donde alcanzan sus ojos, llegaron a Canales con esa pancarta que ya conocéis y que elaboraron a lo largo de su viaje.
Fermi, deseosa de reencontrarse con sus orígenes y con sus amigos virtuales supo reconocernos uno a uno antes de cada abrazo. Parecía algo tan natural como si fuera leyendo nuestra identificación en el fondo de nuestras pupilas.
Sé que pasó días de reencuentros emocionados al comprobar que su niñez no fue un cuento. Que Luisa, Anita, Feli, Resti, la madre de los Lema, Gemma, Sara y otras compañeras de escuela supieron reconocerla.
Y sintió la emoción de oírse llamar Minita que la transportó al mundo de los sueños infantiles, los juegos, las carreras por la era, la subida a la peñina o alcanzar una fuente que brota entre la roca.
Y como os podéis imaginar ya no es fácil encaramarse a una peña más alta, ni adentrarse en un sendero más espeso o entorpecido por la maleza, persiguiendo un manantial más recóndito… así que Miguel y la Teso hicieron de cicerones con su todoterreno desde donde pudieron apreciar el libro de la naturaleza de nuestro pueblo. ¿Habéis visto las fotos del pueblo desde las alturas? Creo que son testimonio de ese peregrinaje en la mañana de S. Roque.
Quiero pensar que Fermi revivió sensaciones únicas al resultar reconocibles en cada revuelta de los caminos los accidentes del terreno, aquel árbol a cuya sombra se reunía siendo niña, los rasponazos en las rodillas al querer emular a los titiriteros, los arañazos del zarzal al jugar al esconderite entre las matas del monte…
Lola la dejaba disfrutar y cuando le parecía hacía suyas las plurales vivencias de Fermi que conocía de tanto oírselas contar o se evadía en bromas con todos. Ya la habéis visto… Es incansable!
Os deseo que sigáis flipando en este mundo de sensaciones que es nuestro foro y de los buenos recuerdos que os habéis llevado en vuestro equipaje. Yo cuando echo un vistazo a todas estas fotos y os leo disfruto de ese regusto tan bueno… por haberos conocido!
Un abrazo, Mariajesús Morla
Deseosas de expandir la alegría y de empujar la raya del horizonte más allá de donde alcanzan sus ojos, llegaron a Canales con esa pancarta que ya conocéis y que elaboraron a lo largo de su viaje.
Fermi, deseosa de reencontrarse con sus orígenes y con sus amigos virtuales supo reconocernos uno a uno antes de cada abrazo. Parecía algo tan natural como si fuera leyendo nuestra identificación en el fondo de nuestras pupilas.
Sé que pasó días de reencuentros emocionados al comprobar que su niñez no fue un cuento. Que Luisa, Anita, Feli, Resti, la madre de los Lema, Gemma, Sara y otras compañeras de escuela supieron reconocerla.
Y sintió la emoción de oírse llamar Minita que la transportó al mundo de los sueños infantiles, los juegos, las carreras por la era, la subida a la peñina o alcanzar una fuente que brota entre la roca.
Y como os podéis imaginar ya no es fácil encaramarse a una peña más alta, ni adentrarse en un sendero más espeso o entorpecido por la maleza, persiguiendo un manantial más recóndito… así que Miguel y la Teso hicieron de cicerones con su todoterreno desde donde pudieron apreciar el libro de la naturaleza de nuestro pueblo. ¿Habéis visto las fotos del pueblo desde las alturas? Creo que son testimonio de ese peregrinaje en la mañana de S. Roque.
Quiero pensar que Fermi revivió sensaciones únicas al resultar reconocibles en cada revuelta de los caminos los accidentes del terreno, aquel árbol a cuya sombra se reunía siendo niña, los rasponazos en las rodillas al querer emular a los titiriteros, los arañazos del zarzal al jugar al esconderite entre las matas del monte…
Lola la dejaba disfrutar y cuando le parecía hacía suyas las plurales vivencias de Fermi que conocía de tanto oírselas contar o se evadía en bromas con todos. Ya la habéis visto… Es incansable!
Os deseo que sigáis flipando en este mundo de sensaciones que es nuestro foro y de los buenos recuerdos que os habéis llevado en vuestro equipaje. Yo cuando echo un vistazo a todas estas fotos y os leo disfruto de ese regusto tan bueno… por haberos conocido!
Un abrazo, Mariajesús Morla
Mariajesús, estoy ahora mismo que no tengo palabras para decirte.. ¡que suerte la mía haberos conocido!. Esa comida de "SOBRAS" como tú la llamas, siempre permanecerá en mis recuerdos. Es para reflexionar, a veces, una, desea cumplir una meta y sacar adelante situaciones dificiles, pero no es fácil. Ésto es una realidad, sin saber, ni conocer, ni esperar nada, llegamos a vuestro pueblín, con alegria e ilusión y "alguien, vosotros, querida familia", como dice Minita, nos habéis regalado, sólo con vuestra presencia: cariño, humildad, amistad, alegría etc. REGALOS hay muchos, pero pocos como éstos.
GRACIAS queridos amigos, en primer lugar, por haber hecho feliz a mi amiga Fermi, se lo merece, bien lo sabéis. En segundo lugar GRACIAS por las emociones que nos transmitisteis. A vosotros, querida familia, mi cariño incondicional.
Un abrazo muy fuerte para tu esposo y tu hijo David. Y para tí.. muaaaaaaaaa
GRACIAS queridos amigos, en primer lugar, por haber hecho feliz a mi amiga Fermi, se lo merece, bien lo sabéis. En segundo lugar GRACIAS por las emociones que nos transmitisteis. A vosotros, querida familia, mi cariño incondicional.
Un abrazo muy fuerte para tu esposo y tu hijo David. Y para tí.. muaaaaaaaaa
Queridas Lola e Isabel: Ya quisiera yo disponer de las palabras mágicas o al menos las adecuadas para expresar todo lo que observé y sentí. Sé que me quedo corta... y conmigo coincidirá todo el foro que tuvo el gusto de conocer a estas dos maravillosas amigas. Me he quedado corta... muy corta!. Besos.
Por cierto, aprovecharé en días sucesivos para aportaros mi visión sobre los días de ensayo y la representación del calecho. Yo también era espectadora de las reacciones de los demás y quiero contárselas sobre todo a los ausentes para que vean a través de mis ojos, si lo creen conveniente, lo que allí se vivió. Abrazos para todos.
Por cierto, aprovecharé en días sucesivos para aportaros mi visión sobre los días de ensayo y la representación del calecho. Yo también era espectadora de las reacciones de los demás y quiero contárselas sobre todo a los ausentes para que vean a través de mis ojos, si lo creen conveniente, lo que allí se vivió. Abrazos para todos.
