Los concesionarios de coches de la provincia han denunciado que cerca del 40% de los coches vendidos bajo el paraguas de la ayuda de los 2.000 euros del Plan 2000E y adelantados por los propios concesionarios podrían quedarse sin parte de la subvención en los dos tramos de 500 euros que deben abonar tanto el Estado como la Junta de Castilla y León. La situación es debida a la tardanza en implementar el proceso informático para validar las ayudas puesto en marcha el pasado 25 de marzo, casi tres meses después de ponerse en marcha el Plan.»