Hola Carlos, carmina... no me puedo creer que estuvieras durmiendo la siesta! je! je!
Pues no he dormido pero estaba muy a gusto al solecito. pero el perro no me dejaba tranquila.
Pues enseñale el cubo de la basura, veras como no se arrima, jajajajaaa
Estaba en otra parte, jajaja