Buenas
noches querido Calecho.
A las ocho y media llamé a María Isabel y no me lo cogía. Acto seguido lo hice al móvil de Ofe y en principio tampoco, pero ya después sí que me llamó ella. Tenían una
reunión que, a juzgar por el bullicio, prometía y mucho. Me comentó que estaban los ocho magníficos más el
Santo de Jose, Ismael (el de María Isabel) y Alfredo el marido de Ana Marta.