Luz ahora 0,05553 €/kWh

LA NUEZ DE ARRIBA: Le decía el Manzano:...

EL ÁRBOL SIN IDENTIDAD

En algún lugar que podría ser cualquier lugar, y en un tiempo que podría ser cualquier tiempo, un hermoso jardín con manzanos, naranjos, perales y bellísimos rosales, todos ellos eran felices y estaban satisfechos con ellos mismos, excepto un árbol que siempre estaba profundamente triste.

Su problema era que ¡No sabía quién era.! Lo que le faltaba era concentración, identificación y aceptación.

Le decía el Manzano:

Si realmente lo intentas, podrás tener sabrosísimas manzanas, ¡ve que fácil es, se como yo!

No lo escuches, exigía el rosal. Es más sencillo tener rosas y ¡ve que bellas son, trata de ser como yo!

Y el árbol desesperado, intentaba todo lo que le sugerían, y como no lograba ser como los demás, se sentía cada vez más frustrado. Un día llegó hasta el jardín el búho, la más sabia de las aves, y al ver la desesperación del árbol, exclamó:

No te preocupes, tu problema no es tan grave, es el mismo de muchísimos seres sobre la Tierra. Yo te daré la solución... No dediques tu vida a ser como los demás quieran que seas. Sé tú mismo, conócete... y para lograrlo, escucha tu voz interior.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Y dicho esto, el búho desapareció.

¿Mi voz interior?... ¿Ser yo mismo?... ¿Conocerme?..." Se preguntaba el árbol desesperado, cuando de pronto, comprendió y cerrando los ojos y los oídos, abrió el corazón, y por fin pudo escuchar su voz interior diciéndole:

Tú jamás darás manzanas porque no eres un manzano, ni florecerás cada primavera porque no eres un rosal. Eres un roble, y tu destino es crecer grande y majestuoso. Dar cobijo a las aves, sombra a los viajeros, belleza al paisaje... Tienes ... (ver texto completo)
! Hola Victoria! Instructivo tu escrito. Desgraciadamente, abundan los corazones, latiendo, solo en su función, y se maquilla de mil maneras, todo porque los cerebros, envían señales, hacia una especie de carreta, chirriando de sus ejes mal engrasados por los caminos.

" ¿Y yo porque me voy a acercar, a aquellas casetas, donde gimen, los enterrados de frío y de barro? Sería perder el tiempo, que cada cual salga de su hoyo, ami solo me interesan, que mis cuentas corrientes abulten... ¿que me importan ... (ver texto completo)