Pues bien: el tío Buscabeatas pertenecía al gremio de estos hortelanos.
Ya principiaba a encorvarse en la época del suceso que voy a referir; y era que ya tenía sesenta años... y llevaba cuarenta de labrar una huerta lindante con la playa de la Costilla.
Aquel año había criado allí unas estupendas calabazas, tamañas como bolas decorativas de pretil de puente monumental, y que ya principiaban a ponerse por dentro y por fuera de color de naranja, lo cual quería decir que había mediado el mes de junio. ... (ver texto completo)
Ya principiaba a encorvarse en la época del suceso que voy a referir; y era que ya tenía sesenta años... y llevaba cuarenta de labrar una huerta lindante con la playa de la Costilla.
Aquel año había criado allí unas estupendas calabazas, tamañas como bolas decorativas de pretil de puente monumental, y que ya principiaban a ponerse por dentro y por fuera de color de naranja, lo cual quería decir que había mediado el mes de junio. ... (ver texto completo)
- ¡Pronto tendremos que separarnos!
Al fin, una tarde se resolvió al sacrificio; y señalando a los mejores frutos de aquellas amadísimas cucurbitáceas que tantos afanes le habían costado, pronunció la terrible sentencia:
-Mañana -dijo- cortaré estas cuarenta, y las llevaré al mercado de Cádiz. ¡Feliz quien se las coma!
Y se marchó a su casa con paso lento, y pasó la noche con las angustias del padre que va a casar una hija al día siguiente.
- ¡Lástima de mis calabazas! -suspiraba a veces sin ... (ver texto completo)
Al fin, una tarde se resolvió al sacrificio; y señalando a los mejores frutos de aquellas amadísimas cucurbitáceas que tantos afanes le habían costado, pronunció la terrible sentencia:
-Mañana -dijo- cortaré estas cuarenta, y las llevaré al mercado de Cádiz. ¡Feliz quien se las coma!
Y se marchó a su casa con paso lento, y pasó la noche con las angustias del padre que va a casar una hija al día siguiente.
- ¡Lástima de mis calabazas! -suspiraba a veces sin ... (ver texto completo)
