Pudiera estar horas hablándote de otras muchas anécdotas. Y seguro que reirías con espontaneidad de algunas de ellas
Ahora, forjare, la quimera, tu contandome, y yo solo escuchando.
mi abrazo.
Ahora, forjare, la quimera, tu contandome, y yo solo escuchando.
mi abrazo.