Capitel, FUENTE URBEL

El buen Dios había querido dirigir su pasos no hacia el occidente, el lugar en el que sus antepasados creían que resucitaban las almas y emprendían el camino de regreso al cielo, sino hacia unas tierras extrañas, pero hermosas. Unas tierras que todos conocían con el nombre de Fuente Urbel.

Tanto el destino de Aidan como el de su grupo cambió, como ocurre siempre, sin ellos buscarlo. Movido por la curiosidad, Aidan se dirigió hacia uno de los acantilados de la abrupta costa a la que acababan de...
esculturas hasta la llegada de la embajada del obispo. Los clérigos francos tenían razón. Si había un culpable, ese era él, Aidan de Murlough. Sí, culpable de querer convertir las viejas imágenes que había aprendido en las tradiciones del clan de sus abuelo, los MacNjil, en el símbolo perfecto de las almas de todos los hombres.

Sin embargo, en ningún momento Aidan se arrepintió aquella noche de la decisión que había tomado hacía ya unos cuantos años. Como todos los nativos de la bahía de Murlough,...
Aidan quiso responderle, justificar su programa, el contenido de las bellas imágenes que entre todos habían labrado, pero el clérigo llegado desde Burgos no le dejó, ya que continuó con su argumentación:
-Nosotros hemos venido aquí a eliminar todo vestigio del viejo rito hispano y nos encontramos con esto.
- ¿Qué quieres decir? -Ahora sí, le cortó Aidan colocándose intencionadamente como su igual y hablándole de tú a tú-.
-Vuestras imágenes son el símbolo de algunos de los viejos cultos celtas...
Aquella noche, el miedo pudo más. La suerte de cinco hombres dependió de la decisión de un hombre con fiebre. Debían separarse para siempre. Tenían que huir. Una vez más, los antiguos gessa, los tabú del clan de los MacNjil, tenían razón. No podían continuar juntos. Habían esculpido bien. Por fin, se había hecho piedra la norma que exigía la estricta observancia de una tradición milenaria que habían aprendido en tierras lejanas.

Sin embargo, todo se había complicado cuando quisieron esculpir un...
CUENTO, HISTORICO + O -

El sendero de Piedra

A todos los vecinos de Fuente Urbel:
tanto a los que todavía hoy habitan sus casas
como a los que un día tuvieron que abandonarlas.
A Miguel A. Martín (Demiguel) por enseñarnos a ver este templo románico con otros ojos.
Fernando Ezquerra Lapetra (Corbio)