La Paz es fruto de la Justicia. No puede haber paz, no hay paz, mientras no haya una verdadera, auténtica y fundamentada justicia a cualquier nivel. A nivel familiar, a nivel de organización, a nivel de ciudad, a nivel de país, y dentro del país, a nivel de relaciones entre gobiernos y pueblo, a nivel internacional, a nivel de las relaciones entre gobernantes de diversos países, tanto de un continente como del mundo entero. Si no se pone en práctica la justicia no podemos hablar de paz. (Enc. Con los Estudiantes Universitarios, Cuenca 4 de junio de 1.986)
Y yo creo que Norteamérica es potencia con el sudor, con el hambre, con la muerte prematura de los pueblos del Tercer mundo, de los pueblos de América Latina, con el hambre y con la muerte de los pobres que también viven dentro del mismo país de Norteamérica. (Enc. Con los Estudiantes Universitarios, Cuenca 4 de junio de 1.986)
Y yo creo que Norteamérica es potencia con el sudor, con el hambre, con la muerte prematura de los pueblos del Tercer mundo, de los pueblos de América Latina, con el hambre y con la muerte de los pobres que también viven dentro del mismo país de Norteamérica. (Enc. Con los Estudiantes Universitarios, Cuenca 4 de junio de 1.986)