Esacucha y el nacimiento de una orquidea
*******************
Un día más, como tantos que he
pasado con vosotros,
y sin embargo hoy ha ocurrido
algo que ha llenado mi vida.
¡He asistido al nacimiento de una orquídea!
Y me ha colmado de alegría.
¡Tan hermosa! ¡Tan primitiva!
Una orquidea en el medio del camino,
una orquídea que se abría.
- Todos querían cogerla -
Pero yo fui el primero que la vio,
- era mía -
El dueño del terreno, otro que era segador
y que decía. que estaba al borde
del camino, y discutía.
¡Y yo que fui su enamorado!
Y puse mi nota dolorida,
¡Perdonarla por favor!
¡Perdonarla!
- No vale la porfía _
¡Perdonadle la vida!
Pues sólo vive un día …
***************
En el IV centenario de la muerte de San Juan de la Cruz
Toda la soledad se llena de rumores,
un mundo májico y místico,
es el mundo del amor de los amores.
Fray Juan espera el final de la noche oscura
para hacer de su luz algo precioso.
Noche oscura ¡Oh luz!
Que ha sido una hermosura.
Aquella de la oración del alma enamorada,
que se escapó de su cárcel
en noche oscura y perfumada.
Escuchó el silbido de los aires amorosos
haciendo de ella su única morada,
y se le alegra el alma.
Mientras adivina que hay más
y acude a El - su música callada.
donde encuentra la calma.
Escucha…
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Manuel Gonzalez Alvarez
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Un día más, como tantos que he
pasado con vosotros,
y sin embargo hoy ha ocurrido
algo que ha llenado mi vida.
¡He asistido al nacimiento de una orquídea!
Y me ha colmado de alegría.
¡Tan hermosa! ¡Tan primitiva!
Una orquidea en el medio del camino,
una orquídea que se abría.
- Todos querían cogerla -
Pero yo fui el primero que la vio,
- era mía -
El dueño del terreno, otro que era segador
y que decía. que estaba al borde
del camino, y discutía.
¡Y yo que fui su enamorado!
Y puse mi nota dolorida,
¡Perdonarla por favor!
¡Perdonarla!
- No vale la porfía _
¡Perdonadle la vida!
Pues sólo vive un día …
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En el IV centenario de la muerte de San Juan de la Cruz
Toda la soledad se llena de rumores,
un mundo májico y místico,
es el mundo del amor de los amores.
Fray Juan espera el final de la noche oscura
para hacer de su luz algo precioso.
Noche oscura ¡Oh luz!
Que ha sido una hermosura.
Aquella de la oración del alma enamorada,
que se escapó de su cárcel
en noche oscura y perfumada.
Escuchó el silbido de los aires amorosos
haciendo de ella su única morada,
y se le alegra el alma.
Mientras adivina que hay más
y acude a El - su música callada.
donde encuentra la calma.
Escucha…
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Manuel Gonzalez Alvarez