TOLEDO: Las marcas de cantero son símbolos o alegorías grabadas...

Las marcas de cantero son símbolos o alegorías grabadas por los canteros en la piedra que en la Antigüedad y Edad Media representaban realidades o ideas abstractas mediante sus rasgos, figuras o atributos; en la actualidad desconocemos su interpretación por haber perdido o cambiado su significado simbólico. Forman parte de los llamados signos lapidarios, término que proviene del latín lapis, lapidis (piedra), signo grabado en la piedra.
Se grababan con un cincel fino. Su morfología está tomada del lenguaje y oficios medievales. Actualmente pueden observarse en edificios de los siglos XI al XV.
Estudiándolas, se pueden conocer muchos detalles acerca de estos constructores anónimos, las rutas que seguían, grado de experiencia, cuántos canteros trabajaron en la obra, etc. La disciplina que estudia, clasifica e investiga los signos lapidarios se llama Gliptografía.
En esa época, las logias de canteros asignaban una marca a cada aprendiz que alcanzaba el grado de maestro, comprometiéndose a utilizarla en todos sus trabajos; sus descendientes la personalizaban mediante pequeñas modificaciones en su diseño.

Actualmente, la hipótesis más aceptada es la expuesta por Victor Didron y la opinión más generalizada es que se trata de marcas de propiedad, utilizadas por las agrupaciones de oficios artesanos para contabilizar el nº de piezas trabajadas por cada cantero y de esta forma cobrar por la cantidad de piedras labradas, marcas de posición y ensamblado para que el albañil las colocara en una posición determinada y signos que permitían identificar las logias, gremios y talleres en la Edad Media.