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GALVEZ: Buenas, soy el NO Dalai Lama. Vuelvo a haceros otro...

Buenas, soy el NO Dalai Lama.
Vuelvo a haceros otro "copia-pega" de mi cosecha propia, que está por aquí hace tiempo, pero que al parecer muchos no han leido por no estar en este apartado de la foto de "El Fuerte".

RECUERDOS DEL "SAN ANTóN" de hace décadas.

Recuerdo que, allá entre la mitad de los años 50 y hasta muy principios de los 70 del siglo pasado, la fiesta de San Antón, tenía mucha acogida en Gálvez, no había pueblo en sus alrededores, que yo recuerde, que hiciera esa noche, el mismo tipo de fiesta, al menos de esa manera y por supuesto en ninguna localidad conocida de la provincia, se celebraba como si del carnaval se tratara.

He de decir para, la gente muy joven, que en aquella época y como motivo de la época política que vivíamos, era bastante raro, que en otros sitios de España, se permitiera celebrar el carnaval y menos enmascarándose la faz, cosa que ahora con el tiempo me parece raro que se permitiera en aquellos años, ya que se solían alegar razones de seguridad, y evitar presuntas represalias debidas aún a los odios entre ciudadanos de diferentes formas de pensar, debido a la incruenta guerra civil que enfrentó a nuestros antecesores;dicho esto, sin ánimo de crear polémica de ningún tipo.

-Bien, pues sabed que por aquel entonces, se disfrazaba prácticamente todo el pueblo, las "Luminarias" eran muchas más que hoy en día, dado que al no estar las calles pavimentadas, no había peligro de estropear el cemento o el asfalto.

-Como los medios económicos eran muy escasos, la gente se disfrazaba, con cualquier cosa que tuviera a mano, ropas viejas, de los padres o abuelos y raras veces se veía a alguien con disfraces comprados o hechos a propósito para aquel día.

-Era típico usar caretas de cartón, o antifaces, muchas veces fabricadas de forma artesanal, o unos simples trapos, bufandas o similar enrrolladas a la cabeza y la cara, las que servían a modo de enmascaramiento facial.

-Lo que no podía faltar de ningún modo eran los típicos cencerros, cuanto mas grandes y numerosos fueran mejor; para atárselos a la cintura; si llegaba el caso hasta se llevaban cencerros en la mano o panteretas, tambores, carracas, pitos, trompetas o instrumentos musicales de jugete, para hacer ruido.

-También era muy habitual llevar un palo, una escoba u otro utensilio, para "Jinchar" a otros enmascarados o a la gente que no se disfrazaba y estaba alrededor de las "Luminarias" e increparles a ver si te reconocían.

-De esta guisa, recorrían prácticamente todas las calles los disfrazados, cantando, soplando pitos o los presuntos instrumentos de viento o dándole de lo lindo a los artilugios de ruido diverso;o voceando el sonido onomatopéyico, que tuviera relación con el disfraz que una/o llevaba o simulaba llevar, pues la verdad muchas veces había que tener mucha imaginación, para creer que ciertos disfraces se parecieran en algo a aquello de lo que alguien decía que iba disfrazado.

-Típicas eran también ciertas gamberradas en aquella noche, dado que era bastante corriente hacer que se cocinaran "Puches" para comerlas (harina diluida en agua, con bastante azucar y anises, hervidas hasta cuajar), siempre había mas de uno, que tenía la desagradable idea de meter las "Puches" en algunas cerraduras de puertas y que al que le tocaba en su puerta, no guardaba buen recuerdo de quien hacia esa fechoría, ya que eso, una vez secas las "puches" y dado que por aquellos entonces helaba mucho mas que ahora, cuando aquello cuajaba y se helaba dentro de las cerraduras se convertía prácticamente en un cemento muy difícil de sacar.

-Aunque se hacían churros esa noche en casa de "el Quinto" unos metros mas abajo de donde ahora tienen los frutos secos o incluso en casa de "el Foro", casa de la esquina enfrente de la actual Farmacia (había por entonces otra farmacia en la Plaza, en el caserón frente a donde se pone el tablado de los músicos en la feria, no recuerdo yo que el ayuntamiento, invitara a los vecinos, sino que cada cual se los compraba de su bolsillo, si tenía recursos para ello o su economía se lo podía permitir.

Saludos Jóvenes galveños.