Querido Presidente. Soy un humilde español que en su día creyó que algún día no volveríamos a presenciar más atentados terroristas. En el anterior gobierno, tuvimos la esperanza de que así fuera y, aunque no ocurrió, nadie echó la culpa a los que ahora quieren hacer de verdugos del actual gobierno. ¿Por qué esa falta de respeto? ¿Quiénes se han creído ellos, después de cómo nos contaron el atentado terrorista del once de marzo?
Ahora, pienso en cómo ustedes nos han contado todo el proceso, desde que se inició hasta que ETA ha decidido terminarlo. Siempre nos ha pedido cautela y precaución y nos ha advertido que sería un proceso largo y difícil, además puso una condición, no habría proceso con violencia. Usted ha cumplido con lo que dijo, no ha engañado a nadie. Sin embargo, existe un gran empeño por parte de la oposición en decir que se lo advirtieron, ¿el qué? ¿lo que usted ya nos contó en su momento?, no se, es como el hambriento que camina por un campo de minas para poder comer en la otra orilla y, los demás hambrientos, se quedan tirando piedras y diciendo: "cuidado, cuidado". Ya voy con cuidado señores, pero si no arriesgo, no como. Sin embargo, ya podían ustedes apoyarme caminando conmigo. De esa forma, habrán más posibilidades de llegar hasta el fin y el bien común para todos los que desean la paz.
Querido presidente, usted ha pecado de optimista. No se preocupe, aquí tiene a un español que también y no se crea que me arrepiento. Sigo siendo optimista y se que con presidentes como usted, podremos llegar al fin. Con o sin la tregua de ETA o del Popular Partido. Animo.
[GoogleBarVIP= 2].
... (ver texto completo)