Metidos ya, como aquel que dice, en las
fiestas de
Navidad y habiendo pasado (afortunadamente) muchas Nochebuenas, me viene a la memoria lo que han cambiado estas celebraciones en lo que va de medio siglo a esta parte; y según en el lugar donde te encuentres. Recuerdo de chaval, en el
pueblo, lo entrañable que eran, sin grandes lujos, mejorando en la mesa el menú ordinario y con aquellos dulces caseros que se comían solo en estas fechas, y que sabían a gloria. Eran unas fiestas con poco relumbrón,
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