Reflexión
A cada uno se le da lo que puede llevar.
Es cierto que algo de verdad encierra esta frase que yo traigo al presente y que no es mía, sino que un día la oí pronunciar de una persona que era muy elocuente y que llegue a conocerla por su frutos que eran agraces.
Pero como una persona no ha sido de estudios que me dedique a recoger, ordenar, relacionar y simplificar lo que de fuera me vino al final complete mi librillo en el cual me sirve para contrastar muchas cosas en las que incurro a diario y me digo Jolines, si esto ya me paso en aquella fecha, lo único que me entretengo es en ver que ánimo tuve entonces y cual tengo ahora que he incurrido en el mismo error.
Pero siempre he sido un hombre de esperanza y me he apoyado en el refranero manchego en cual reza que un día malo pare uno bueno y viceversa y esta es la pura realidad, ves que por la tarde hay grandes nubarrones en tu cabeza y que al venir la claridad de la mañana del nuevo día el cielo esta raso y tu mente se ha despejado con el sueño.
Y es que aquí donde me acuerdo de San Ambrosio que ya en el siglo IV de la era cristiana dijo: “”Tu eres Dios creador de cuanto existe, del mundo gobernador supremo, que al día vistes con luz brillante, de grato sueño la noche triste, a fin de que los cuerpos rendidos el descanso al trabajo prepare y las mentes cansadas repare y los pechos de pena oprimidos”””. Donde quieras que estés GRECO te mando un caluroso abrazo espiritual, por haberme dicho un día que está sembrado.
A cada uno se le da lo que puede llevar.
Es cierto que algo de verdad encierra esta frase que yo traigo al presente y que no es mía, sino que un día la oí pronunciar de una persona que era muy elocuente y que llegue a conocerla por su frutos que eran agraces.
Pero como una persona no ha sido de estudios que me dedique a recoger, ordenar, relacionar y simplificar lo que de fuera me vino al final complete mi librillo en el cual me sirve para contrastar muchas cosas en las que incurro a diario y me digo Jolines, si esto ya me paso en aquella fecha, lo único que me entretengo es en ver que ánimo tuve entonces y cual tengo ahora que he incurrido en el mismo error.
Pero siempre he sido un hombre de esperanza y me he apoyado en el refranero manchego en cual reza que un día malo pare uno bueno y viceversa y esta es la pura realidad, ves que por la tarde hay grandes nubarrones en tu cabeza y que al venir la claridad de la mañana del nuevo día el cielo esta raso y tu mente se ha despejado con el sueño.
Y es que aquí donde me acuerdo de San Ambrosio que ya en el siglo IV de la era cristiana dijo: “”Tu eres Dios creador de cuanto existe, del mundo gobernador supremo, que al día vistes con luz brillante, de grato sueño la noche triste, a fin de que los cuerpos rendidos el descanso al trabajo prepare y las mentes cansadas repare y los pechos de pena oprimidos”””. Donde quieras que estés GRECO te mando un caluroso abrazo espiritual, por haberme dicho un día que está sembrado.