Frases del día:
Cosa hallada, no es hurtada
Con las glorias, se olvidan las memorias
Con la vara que midas, serás medido
Compañía de dos, compañía de Dios
Comer y rascar, todo es empezar
LA ESPIGADORA
Labores clásicas de trabajo que ya el tiempo las ha sepultado como todo en esta vida, el tiempo es un maestro en todo, y es que el tiempo es un poco olvidadizo y por ello un día que tuvo poco trabajo invento lo que le era necesario como fue la escritura.
Todos los pueblos de la Tierra inventaron su escritura que primero fueron los dibujos y luego los signos hasta llegar a crear los alfabetos unos con letras y otros con signos, pero todos quisieron conservar sus leyendas y tradiciones para que el tiempo no las sepultase.
Hasta llegar a este estado de perfección tuvo que pasarse mucho tiempo, pero al final el tiempo mismo tuvo este feliz alumbramiento como fue la escritura.
Esto lleva a un servidor a contaros que no hace tantos años en la VILLA DE BELMONTE salía de su Ilustres Ayuntamiento un EDICTO en el cual se prohibía de ir a espigar individualmente, que el que lo quisiera hacer tenia que sumarse al conjunto del grupo al que se le denominaba LA DULA.
De esto soy testigo porque me sume a ella, y el lugar de salida era la PLAZA DEL PILAR en la cual había un guarda rural esperando para conducir al conjunto de personas denominada LA DULA, el lugar favorito era las casa de LOS PADRES. la BONA y el POZUELO.
Esto me recuerda a las películas de los Diez Mandamientos, cuando Moisés conducía a la muchedumbre de Israelitas que iban buscando la tierra prometida, nosotros íbamos en busca de las espigas que habían dejado los segadores caídas en el rastrojo.
Todavía me acuerdo del guarda RURAL, aunque no de su nombre que Dios lo tenga en su gloria, este buen señor había estado en la DIVISIÓN AZUL y tenia una memoria prodigiosa para contar todo lo que vivió en esa contienda. JOLINES, como te pescara por su cuenta y te gustase el tema ya tenias hecha la jornada de la ESPIGA
Cosa hallada, no es hurtada
Con las glorias, se olvidan las memorias
Con la vara que midas, serás medido
Compañía de dos, compañía de Dios
Comer y rascar, todo es empezar
LA ESPIGADORA
Labores clásicas de trabajo que ya el tiempo las ha sepultado como todo en esta vida, el tiempo es un maestro en todo, y es que el tiempo es un poco olvidadizo y por ello un día que tuvo poco trabajo invento lo que le era necesario como fue la escritura.
Todos los pueblos de la Tierra inventaron su escritura que primero fueron los dibujos y luego los signos hasta llegar a crear los alfabetos unos con letras y otros con signos, pero todos quisieron conservar sus leyendas y tradiciones para que el tiempo no las sepultase.
Hasta llegar a este estado de perfección tuvo que pasarse mucho tiempo, pero al final el tiempo mismo tuvo este feliz alumbramiento como fue la escritura.
Esto lleva a un servidor a contaros que no hace tantos años en la VILLA DE BELMONTE salía de su Ilustres Ayuntamiento un EDICTO en el cual se prohibía de ir a espigar individualmente, que el que lo quisiera hacer tenia que sumarse al conjunto del grupo al que se le denominaba LA DULA.
De esto soy testigo porque me sume a ella, y el lugar de salida era la PLAZA DEL PILAR en la cual había un guarda rural esperando para conducir al conjunto de personas denominada LA DULA, el lugar favorito era las casa de LOS PADRES. la BONA y el POZUELO.
Esto me recuerda a las películas de los Diez Mandamientos, cuando Moisés conducía a la muchedumbre de Israelitas que iban buscando la tierra prometida, nosotros íbamos en busca de las espigas que habían dejado los segadores caídas en el rastrojo.
Todavía me acuerdo del guarda RURAL, aunque no de su nombre que Dios lo tenga en su gloria, este buen señor había estado en la DIVISIÓN AZUL y tenia una memoria prodigiosa para contar todo lo que vivió en esa contienda. JOLINES, como te pescara por su cuenta y te gustase el tema ya tenias hecha la jornada de la ESPIGA