Cuento:
Tema: de lo que aconteció a un rey de Córdoba que se llama Alhaquen
Un día hablaba el conde Lucanor con Patronio, su consejero, de esta forma
Patronio, quiero decirte que yo soy un gran cazador y que he cazado mucho como nunca ha cazado otro hombre, incluso he añadido en las caperuzas, y en los capillos algunas cosas muy provechosas que nunca fueron hechas y que ahora los que quieren decir mal de mi llegan a critícame en forma de burla, y cuando ensalza al Cid, Rodrigo Díaz o al conde Fernán González de cuantas batallas vencieron o al santo y bienaventurado rey don Fernando de cuantas buenas conquistas hizo, me alaban a mi diciendo que hice muy bien hecho porque añadí aquello en la caperuza y en los capillos.
Yo entiendo que estos que me alaban, es una critica mas que una alabanza, y quiero que me aconsejes de que manera yo lo puedo entender para que no me crezca por una obra buena hecha.
Señor conde Lucanor – dijo Petronio - para que vos lo pueda entender lo que le quiero explicar se lo diré de esta forma: creo que sabe usted ya lo que le aconteció a un moro que fue rey de Córdoba.
Entonces el conde le pregunto como había sido aquello-
Señor conde dijo Patronio, en Cordoba hubo un rey que su nombre era Ahaquer, Como quiera mantenía las cosas tal y como estaba porque creía que estaban bien, no se preocupaba hacer otras cosas honradas ni de gran fama, de las que suelen hacer los buenos reyes solo se ha tenia ha mantener su reino como lo había heredado, más los que buenos quieren ser convienen que hagan obras y embellezcan las ciudades para la alegría de el y de su vasallos y de todo su pueblo y así en vida será alabado y a la muerte será recordado por su buenas hazañas, este rey como os digo no se preocupaba de esto ni del que dirán sus gentes, sino que se ocupa de hacer fiestas y esta cómodo en sus palacios y en sus cacerías.
Y sucedió que estando un día de fiesta, y que tocaba los músicos para el vio un instrumento que se utiliza mucho en el pueblo musulmán y que era una flauta. El rey fijándose y puso oído y pensó que no tocaba acorde con los otros instrumentos y cogiendo la flauta hizo le un agujero en la pare de abajo en la dirección de los otros agujeros de la parte de arriba. Y desde aquí en adelante vio y escucho que tenia mejor son la flauta que antes.
Y como vieron que aquello estaba bien hecho para hacer mas agradable el sonido de la flauta, pero que era una cosa pequeña la gente lo comentaba en plan de chunga y en plan irónico lo comentaban muchas veces “ esto es lo que a añadido el rey Alhaquen.
Y esta frase fue comentada en todo su reino, hasta que llego a oídos de rey, el cual preguntó por qué las gentes repetían tanto esta frase. Y como queriéndolo coger lo disimulaban tanto les porfió para que le dijeran la verdad que al fin se la dijeron.
Y cuan esto escucho el rey se entristeció de pena. Pero como era un buen rey, no quiso hacer mal a los que lo criticaban con esta palabra, mas la guardo en corazón y quiso hacer otro añadido de que la gente se sintieran orgullosos y de que la gente lo alabara. Por entonces la Mezquita de Córdoba no estaba acabada y el añadió todo lo que en ella faltaba y quiso acabarla sin demora. Esta es la mayor y más completa de las Mezquitas que hay en España etc. Gracias a Dios y ahora esta convertida en Iglesia y la llaman Santa María de Córdoba, y ofreciola el santo rey Don Fernando a Santa María de Córdoba cuando ganó a Córdoba a los moros.
Y después que este rey acabo la mezquita y añadido todo cuanto faltaba, dijo que pues hasta entonces lo alababa y criticaba por el añadimiento de la flauta que en adelante lo habían de alabar con razón por haber acabado la Mezquita de Córdoba.
Y fue así como paso, que después lo alaban por esto último que había hecho que antes lo criticaba por lo que hizo y hoy en día dicen los moros cuando quieren alabar algún bien hecho “ Este es el añadimiento de Alhaquer
Pues mire señor conde, si pensase o cuidase que lo alabaran por escarnecer del añadimiento que hiciste en los capiello y en las pihuelas y en otra cosa de caza que vos hiciste, pensad de hacer algún hecho mas grande, bueno y noble cual pertenece hacer a un gran hombre como vos, y que por fuerza las gentes habrán de alabar los buenos hechos que hiciese, así como alaban ahora por escarnio el añadimiento que hicisteis en las cosa de la caza. El conde tomo este por buen consejo y hizo así y hállese este muy bien
Y porque don Juan entendió que este era un buen ejemplo hizo escribir en este libro y que el hizo esto verso que dicen así:
Moraleja
Si algún bien hicieras
aunque grande no fuere
hazlo grande si pudieras
que el bien nunca muere
Tema: de lo que aconteció a un rey de Córdoba que se llama Alhaquen
Un día hablaba el conde Lucanor con Patronio, su consejero, de esta forma
Patronio, quiero decirte que yo soy un gran cazador y que he cazado mucho como nunca ha cazado otro hombre, incluso he añadido en las caperuzas, y en los capillos algunas cosas muy provechosas que nunca fueron hechas y que ahora los que quieren decir mal de mi llegan a critícame en forma de burla, y cuando ensalza al Cid, Rodrigo Díaz o al conde Fernán González de cuantas batallas vencieron o al santo y bienaventurado rey don Fernando de cuantas buenas conquistas hizo, me alaban a mi diciendo que hice muy bien hecho porque añadí aquello en la caperuza y en los capillos.
Yo entiendo que estos que me alaban, es una critica mas que una alabanza, y quiero que me aconsejes de que manera yo lo puedo entender para que no me crezca por una obra buena hecha.
Señor conde Lucanor – dijo Petronio - para que vos lo pueda entender lo que le quiero explicar se lo diré de esta forma: creo que sabe usted ya lo que le aconteció a un moro que fue rey de Córdoba.
Entonces el conde le pregunto como había sido aquello-
Señor conde dijo Patronio, en Cordoba hubo un rey que su nombre era Ahaquer, Como quiera mantenía las cosas tal y como estaba porque creía que estaban bien, no se preocupaba hacer otras cosas honradas ni de gran fama, de las que suelen hacer los buenos reyes solo se ha tenia ha mantener su reino como lo había heredado, más los que buenos quieren ser convienen que hagan obras y embellezcan las ciudades para la alegría de el y de su vasallos y de todo su pueblo y así en vida será alabado y a la muerte será recordado por su buenas hazañas, este rey como os digo no se preocupaba de esto ni del que dirán sus gentes, sino que se ocupa de hacer fiestas y esta cómodo en sus palacios y en sus cacerías.
Y sucedió que estando un día de fiesta, y que tocaba los músicos para el vio un instrumento que se utiliza mucho en el pueblo musulmán y que era una flauta. El rey fijándose y puso oído y pensó que no tocaba acorde con los otros instrumentos y cogiendo la flauta hizo le un agujero en la pare de abajo en la dirección de los otros agujeros de la parte de arriba. Y desde aquí en adelante vio y escucho que tenia mejor son la flauta que antes.
Y como vieron que aquello estaba bien hecho para hacer mas agradable el sonido de la flauta, pero que era una cosa pequeña la gente lo comentaba en plan de chunga y en plan irónico lo comentaban muchas veces “ esto es lo que a añadido el rey Alhaquen.
Y esta frase fue comentada en todo su reino, hasta que llego a oídos de rey, el cual preguntó por qué las gentes repetían tanto esta frase. Y como queriéndolo coger lo disimulaban tanto les porfió para que le dijeran la verdad que al fin se la dijeron.
Y cuan esto escucho el rey se entristeció de pena. Pero como era un buen rey, no quiso hacer mal a los que lo criticaban con esta palabra, mas la guardo en corazón y quiso hacer otro añadido de que la gente se sintieran orgullosos y de que la gente lo alabara. Por entonces la Mezquita de Córdoba no estaba acabada y el añadió todo lo que en ella faltaba y quiso acabarla sin demora. Esta es la mayor y más completa de las Mezquitas que hay en España etc. Gracias a Dios y ahora esta convertida en Iglesia y la llaman Santa María de Córdoba, y ofreciola el santo rey Don Fernando a Santa María de Córdoba cuando ganó a Córdoba a los moros.
Y después que este rey acabo la mezquita y añadido todo cuanto faltaba, dijo que pues hasta entonces lo alababa y criticaba por el añadimiento de la flauta que en adelante lo habían de alabar con razón por haber acabado la Mezquita de Córdoba.
Y fue así como paso, que después lo alaban por esto último que había hecho que antes lo criticaba por lo que hizo y hoy en día dicen los moros cuando quieren alabar algún bien hecho “ Este es el añadimiento de Alhaquer
Pues mire señor conde, si pensase o cuidase que lo alabaran por escarnecer del añadimiento que hiciste en los capiello y en las pihuelas y en otra cosa de caza que vos hiciste, pensad de hacer algún hecho mas grande, bueno y noble cual pertenece hacer a un gran hombre como vos, y que por fuerza las gentes habrán de alabar los buenos hechos que hiciese, así como alaban ahora por escarnio el añadimiento que hicisteis en las cosa de la caza. El conde tomo este por buen consejo y hizo así y hállese este muy bien
Y porque don Juan entendió que este era un buen ejemplo hizo escribir en este libro y que el hizo esto verso que dicen así:
Moraleja
Si algún bien hicieras
aunque grande no fuere
hazlo grande si pudieras
que el bien nunca muere