¡! El DIVINO Y NOBLE AJO, MANCHEGO ¡!
Antes la cosa era más humana, manos femeninas nos hincaban, boca arriba y junto con mis hermanos un rasero con tierra fría, ESTE nos cubría, y a los siete u ochos días todos contentos despertábamos y buscábamos la salida para SALIR al recreo.
Ahora la cosa es más fría, con máquinas y a toda prisa nos van dejando, y al mismo tiempo tapando, pero con todo el lió que ellos mueven nosotros nos damos media vuelta y para arriba, buscando la claridad, el Sol, y el aire solano.
Nosotros somos picones, porque tenemos nuestro tallo en el centro que siempre esta verde y presto a dar razón de nuestro origen, somos los ajos, pero en nuestra familia la femenina que es el aja, esta es más suave y sociable para el consumo diario, sabe bailar la jota y es de Aragón.
Hay escrito muchos tópicos sobre nosotros y dicen: los ajos no son para los grajos, eres mas tieso que el palote de un ajo, has comido ajos y tienes lengua de estropajo, quien se pica ajos ha comido, día que pasa de enero y no estoy sembrado es ajo que pierde el ajero.
Pero también tenemos nuestras propiedades, que ilustres doctores desde Hipócrates pasando por Galeno hasta llegar al Doctor. Fleming bien que ellos nos han ensalzado, diciendo que el ajo es vitamínico para el crecimiento del niño bajo, para tener fuerte el estomago come todo los días un ajo, como dentífrico usa un machacado diente de ajo, para la halitosis no hay cosa más maravillosa que el ajo, y no digamos para los choricillos y las morcillas, en las alubias lo utilizaremos con moderación el ajo, por que da algo de flato, y en adobados y aliño no prescindamos del ajo, con sal vino y ajos comienzan algunos alegrarse el año.
Antes la cosa era más humana, manos femeninas nos hincaban, boca arriba y junto con mis hermanos un rasero con tierra fría, ESTE nos cubría, y a los siete u ochos días todos contentos despertábamos y buscábamos la salida para SALIR al recreo.
Ahora la cosa es más fría, con máquinas y a toda prisa nos van dejando, y al mismo tiempo tapando, pero con todo el lió que ellos mueven nosotros nos damos media vuelta y para arriba, buscando la claridad, el Sol, y el aire solano.
Nosotros somos picones, porque tenemos nuestro tallo en el centro que siempre esta verde y presto a dar razón de nuestro origen, somos los ajos, pero en nuestra familia la femenina que es el aja, esta es más suave y sociable para el consumo diario, sabe bailar la jota y es de Aragón.
Hay escrito muchos tópicos sobre nosotros y dicen: los ajos no son para los grajos, eres mas tieso que el palote de un ajo, has comido ajos y tienes lengua de estropajo, quien se pica ajos ha comido, día que pasa de enero y no estoy sembrado es ajo que pierde el ajero.
Pero también tenemos nuestras propiedades, que ilustres doctores desde Hipócrates pasando por Galeno hasta llegar al Doctor. Fleming bien que ellos nos han ensalzado, diciendo que el ajo es vitamínico para el crecimiento del niño bajo, para tener fuerte el estomago come todo los días un ajo, como dentífrico usa un machacado diente de ajo, para la halitosis no hay cosa más maravillosa que el ajo, y no digamos para los choricillos y las morcillas, en las alubias lo utilizaremos con moderación el ajo, por que da algo de flato, y en adobados y aliño no prescindamos del ajo, con sal vino y ajos comienzan algunos alegrarse el año.
