Quedar con amigos, la familia elegida
No elegimos a los yernos, las nueras, los cuñados... ni siquiera a los hermanos. Puede que algunos miembros de la familia no sean las personas con las que nos gustaría compartir la Navidad. Con los amigos no ocurre eso: son los que cada uno elige, cuida y conserva. El ser humano es sociable y estar en compañía es bueno para la salud y la longevidad. Por eso, puede ser buena idea preparar una merienda, una cena o una comida especial para disfrutar con esa vecina de toda la vida o con esos amigos que prefieren quedar con amigos a comer con sus sobrinos.
No elegimos a los yernos, las nueras, los cuñados... ni siquiera a los hermanos. Puede que algunos miembros de la familia no sean las personas con las que nos gustaría compartir la Navidad. Con los amigos no ocurre eso: son los que cada uno elige, cuida y conserva. El ser humano es sociable y estar en compañía es bueno para la salud y la longevidad. Por eso, puede ser buena idea preparar una merienda, una cena o una comida especial para disfrutar con esa vecina de toda la vida o con esos amigos que prefieren quedar con amigos a comer con sus sobrinos.