2. Hidratarse bien
Este consejo es especialmente importante para aliviar y eliminar la mucosidad. Una adecuada hidratación previene la formación del moco y, al mismo tiempo, lo ablanda y facilita su expulsión al toser. Igualmente, el aparato respiratorio necesita unos niveles apropiados de líquidos para que la respiración sea adecuada. Esto se debe a que, cuando no estamos bien hidratados, los pulmones se dilatan para intentar compensar esa falta de líquidos. Eso, en consecuencia, los hace trabajar más y que se vuelvan débiles antes.
Este consejo es especialmente importante para aliviar y eliminar la mucosidad. Una adecuada hidratación previene la formación del moco y, al mismo tiempo, lo ablanda y facilita su expulsión al toser. Igualmente, el aparato respiratorio necesita unos niveles apropiados de líquidos para que la respiración sea adecuada. Esto se debe a que, cuando no estamos bien hidratados, los pulmones se dilatan para intentar compensar esa falta de líquidos. Eso, en consecuencia, los hace trabajar más y que se vuelvan débiles antes.