Videntes marianos católicos y la Asunción
En el siglo XII, la monja alemana Isabel de Schönau recibió visiones de María y su hijo que tuvieron una profunda influencia en la tradición de la Iglesia occidental. En su obra Visio de risinge beate virginis Mariae relata cómo María fue asunta en cuerpo y alma al cielo.
El 1 de mayo de 1950, Gilles Bouhours, (un vidente mariano) comunicó a Pío XII un presunto mensaje que la Virgen María le habría ordenado comunicar al Papa sobre el dogma de la Asunción de la Santísima Virgen María. Se dice que Pío XII pidió a Dios, durante el Año Santo de 1950, una señal que pudiera asegurarle que el dogma de la Asunción de la Virgen María era realmente querido por Dios y cuando Gilles comunicó el mensaje a Pío XII, el cual decía "La Santísima Virgen María no está muerta; ella ascendió al Cielo en cuerpo y alma". el Papa consideró que este mensaje era la señal esperada. Seis meses después de la audiencia privada concedida a Gilles por el Papa, el propio Pío XII proclamó el dogma de la Asunción en cuerpo y alma de la Bienaventurada Virgen María al Cielo.
En el siglo XII, la monja alemana Isabel de Schönau recibió visiones de María y su hijo que tuvieron una profunda influencia en la tradición de la Iglesia occidental. En su obra Visio de risinge beate virginis Mariae relata cómo María fue asunta en cuerpo y alma al cielo.
El 1 de mayo de 1950, Gilles Bouhours, (un vidente mariano) comunicó a Pío XII un presunto mensaje que la Virgen María le habría ordenado comunicar al Papa sobre el dogma de la Asunción de la Santísima Virgen María. Se dice que Pío XII pidió a Dios, durante el Año Santo de 1950, una señal que pudiera asegurarle que el dogma de la Asunción de la Virgen María era realmente querido por Dios y cuando Gilles comunicó el mensaje a Pío XII, el cual decía "La Santísima Virgen María no está muerta; ella ascendió al Cielo en cuerpo y alma". el Papa consideró que este mensaje era la señal esperada. Seis meses después de la audiencia privada concedida a Gilles por el Papa, el propio Pío XII proclamó el dogma de la Asunción en cuerpo y alma de la Bienaventurada Virgen María al Cielo.