Autor: www. cabildodezaragoza. org
Interior de la Basílica del Pilar de Zaragoza
Hasta este lugar se acercó el Papa Juan Pablo II en su visita a Zaragoza como un devoto más de la Virgen
La Santa Capilla
Sin duda alguna, la Santa Capilla es la obra más espléndida del templo, además de constituir el corazón y la razón de ser de toda la basílica.
Realizada por el arquitecto Ventura Rodríguez a partir de una concepción barroca de tipo italianizante, a la que sumó elementos clásicos de materiales ricos, mármoles y jaspes, la Santa Capilla ofrece un conjunto de elementos singulares: tres pórticos curvos, con entablamentos y frontones clasicistas en su frente principal y el muro macizo donde se encuentran los tres altares: dos laterales, uno con el grupo de Convertidos, y el otro, el de la derecha, con la Santa Imagen sobre la Columna; estos dos altares, a modo de hornacinas con doseles, perforan la profundidad del muro con su espacio cóncavo y, en contraste el altar central ofrece el grupo espectacular de la Venida de la María.
Interior de la Basílica del Pilar de Zaragoza
Hasta este lugar se acercó el Papa Juan Pablo II en su visita a Zaragoza como un devoto más de la Virgen
La Santa Capilla
Sin duda alguna, la Santa Capilla es la obra más espléndida del templo, además de constituir el corazón y la razón de ser de toda la basílica.
Realizada por el arquitecto Ventura Rodríguez a partir de una concepción barroca de tipo italianizante, a la que sumó elementos clásicos de materiales ricos, mármoles y jaspes, la Santa Capilla ofrece un conjunto de elementos singulares: tres pórticos curvos, con entablamentos y frontones clasicistas en su frente principal y el muro macizo donde se encuentran los tres altares: dos laterales, uno con el grupo de Convertidos, y el otro, el de la derecha, con la Santa Imagen sobre la Columna; estos dos altares, a modo de hornacinas con doseles, perforan la profundidad del muro con su espacio cóncavo y, en contraste el altar central ofrece el grupo espectacular de la Venida de la María.