Trabajo infantil en México
De acuerdo al informe El trabajo infantil en México: avances y desafíos, elaborado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), la principal causa del trabajo infantil es la pobreza. Otros factores causantes de este fenómeno social es la demanda en hogares, granjas o negocios familiares para que los niños participen en el trabajo; las normas y actitudes sociales y, los costos que implica la educación (uniformes, transporte, material escolar, inscripciones).
Solamente uno de cada cuatro niños trabajadores concluye su educación básica de lo cual se desprenden problemas como el analfabetismo y el ausentismo escolar, altos índices de reprobación, bajo aprovechamiento y deserción escolar. El informe detalla que los motivos por los cuales los niños laboran son los siguientes: 23.3 por ciento trabaja para pagar sus gastos o para la escuela; el 22.5 por ciento lo hace para completar el gasto de sus hogares; 22.4 por ciento realiza estas labores sólo por ayudar y, 13.5 por ciento labora para aprender un oficio.
El trabajo infantil es un problema de escala mundial y aunque en México se ha ido reduciendo, el informe señala que aún hay un estimado de 2 millones 500 mil niños y adolescentes de 5 a 17 años laborando.
La OIT, UNICEF y la oficina de la UNESCO en México exhortan al país a centrar su atención en el acceso a una educación de calidad de todas las niñas, niños y adolescentes como factor clave en la lucha contra el trabajo infantil. Ya que señala que la primera razón por la que las niñas y niños no asisten a la escuela es la falta de interés o actitud, en este sentido es necesario se les dé un seguimiento educativo en comunidades indígenas, con discapacidad o migrantes (como las hijas y los hijos de jornaleros agrícolas).
De acuerdo al informe El trabajo infantil en México: avances y desafíos, elaborado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), la principal causa del trabajo infantil es la pobreza. Otros factores causantes de este fenómeno social es la demanda en hogares, granjas o negocios familiares para que los niños participen en el trabajo; las normas y actitudes sociales y, los costos que implica la educación (uniformes, transporte, material escolar, inscripciones).
Solamente uno de cada cuatro niños trabajadores concluye su educación básica de lo cual se desprenden problemas como el analfabetismo y el ausentismo escolar, altos índices de reprobación, bajo aprovechamiento y deserción escolar. El informe detalla que los motivos por los cuales los niños laboran son los siguientes: 23.3 por ciento trabaja para pagar sus gastos o para la escuela; el 22.5 por ciento lo hace para completar el gasto de sus hogares; 22.4 por ciento realiza estas labores sólo por ayudar y, 13.5 por ciento labora para aprender un oficio.
El trabajo infantil es un problema de escala mundial y aunque en México se ha ido reduciendo, el informe señala que aún hay un estimado de 2 millones 500 mil niños y adolescentes de 5 a 17 años laborando.
La OIT, UNICEF y la oficina de la UNESCO en México exhortan al país a centrar su atención en el acceso a una educación de calidad de todas las niñas, niños y adolescentes como factor clave en la lucha contra el trabajo infantil. Ya que señala que la primera razón por la que las niñas y niños no asisten a la escuela es la falta de interés o actitud, en este sentido es necesario se les dé un seguimiento educativo en comunidades indígenas, con discapacidad o migrantes (como las hijas y los hijos de jornaleros agrícolas).