Nolanea (Rhodophyllus) verna
DÓNDE Y CUÍNDO SE PUEDE ENCONTRARComo ya se ha dicho es una especie que crece sólo en primavera y prefiere vivir en medio de la hierba, en los límites de los bosques o bien entre el musgo, en las zonas abiertas de los claros. Se presentan muchísimos individuos siendo, a veces, la única seta presente en aquel período. DIMENSIONESEs una especie que no tiene grandes dimensiones y, en este caso específico, tampoco muy desarrollada en altura. También puede presentarse cespitosa apareciendo muchos individuos agrupados. El sombrero, después del desarrollo, llega a 4-5 cm de diámetro y la seta, en su conjunto, puede tener una altura de 74 cm. TIPO DE ENVENENAMIENTOSe trata ciertamente de una especie venenosa. Según los casos de envenenamiento que conocemos parece que éste se desarrolla a nivel gastrointestinal, pero con complicaciones incluso más graves, afectando órganos como el hígado y los riñones. No existe literatura y casuística suficientes para poder encuadrar, con una cierta seguridad, en un síndrome específico, a este grupo de setas. Consideramos como tóxicas a todas las especies que a él pertenecen.
DÓNDE Y CUÍNDO SE PUEDE ENCONTRARComo ya se ha dicho es una especie que crece sólo en primavera y prefiere vivir en medio de la hierba, en los límites de los bosques o bien entre el musgo, en las zonas abiertas de los claros. Se presentan muchísimos individuos siendo, a veces, la única seta presente en aquel período. DIMENSIONESEs una especie que no tiene grandes dimensiones y, en este caso específico, tampoco muy desarrollada en altura. También puede presentarse cespitosa apareciendo muchos individuos agrupados. El sombrero, después del desarrollo, llega a 4-5 cm de diámetro y la seta, en su conjunto, puede tener una altura de 74 cm. TIPO DE ENVENENAMIENTOSe trata ciertamente de una especie venenosa. Según los casos de envenenamiento que conocemos parece que éste se desarrolla a nivel gastrointestinal, pero con complicaciones incluso más graves, afectando órganos como el hígado y los riñones. No existe literatura y casuística suficientes para poder encuadrar, con una cierta seguridad, en un síndrome específico, a este grupo de setas. Consideramos como tóxicas a todas las especies que a él pertenecen.