MADRE NUESTRA
1. María Inmaculada, Madre de mi Esperanza
tu «Fiat» permitió, que en el mundo se encarne Dios.
De tu seno nació, con nosotros se quedó,
por eso en Ti ponemos, toda nuestra confianza;
Madre guíanos por la reconciliación.
Madre, eres fortaleza de mi corazón,
nunca me abandones en la duda y el temor.
Con valor, con verdad, con firmeza, con amor,
como Tú, digo yo: «Fiat al Señor».
1. María Inmaculada, Madre de mi Esperanza
tu «Fiat» permitió, que en el mundo se encarne Dios.
De tu seno nació, con nosotros se quedó,
por eso en Ti ponemos, toda nuestra confianza;
Madre guíanos por la reconciliación.
Madre, eres fortaleza de mi corazón,
nunca me abandones en la duda y el temor.
Con valor, con verdad, con firmeza, con amor,
como Tú, digo yo: «Fiat al Señor».