- ¿Quién anda ahí?
Era otra vez el rey de los ecos.
-Soy yo, Hangu.
- ¿Y qué estás haciendo?
-Quemo los rastrojos: con las cenizas abonaré el terreno.
-Muy bien, quiero ayudarte –dijo el rey y envió a trescientos ecos para que ayudasen a Hangu.
Era otra vez el rey de los ecos.
-Soy yo, Hangu.
- ¿Y qué estás haciendo?
-Quemo los rastrojos: con las cenizas abonaré el terreno.
-Muy bien, quiero ayudarte –dijo el rey y envió a trescientos ecos para que ayudasen a Hangu.