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ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Ya lo creo que me llamaba y recuerdo que no le parecía...

Que bueno lo de esta carta de divorcio, Justi. Ha hecho que aflore la sonrisa en mi cara así que esta es buena señal. Mi pierna va mejor, recuperándome poco a poco y usando ya una sola muleta. Ahora espero que llegue un día para ponerme a escribir como antes, a ver si me pongo al día.
Un beso y buenas fallas.

Gracias: No sabes como me alegra haberte sacado una sonrisa, tampoco es muy difícil ¡creo que tu eres alegre por naturaleza.
Veras como poco a poco te terminas de recuperar y todo vuelve a la normalidad. Un beso

Justiiiiiiiiii, a comer no te he invitado pero prepárate para recibir el vocerío que seguidamente te llegará en esta hora de la merienda.

JUSTIIIIIIIII, QUIERES MERENDAR CHOCOLATE CON PICATOSTEEEEEESSSS.... ¡ESTÁS INVITADAAAAAAAAAAAAAAAA!

Que pena no he tenido tiempo de ir a merendar ¡creo que había huelga de trenes ¡pero algún dia te cojere la palabra y me presentare
como por arte de magia, y esos picatostes no se escaparan. Ya has recogido las cerezas? Hija es que siempre estas atarea.
Bueno fuera bromas que me encanta cuando enciendo el aparato (osea) el ordenador y sale todo tu vocerío llamando a comerrrrrrrrrr
a merendarrrrrrrrrrr un beso

Hola Justi. Pues sí, casi siempre estoy ocupada así que he de tener prioridades a la fuerza, aunque casi siempre hago todo lo que quiero o necesito. Esta tarde también he merendado chocolate aunque esta vez sin picatostes ni acompañamiento. ¿A ti no te llamaba tu abuela a comer y a merendar, e incluso alguna vez a cenar? A mi sí, y es que yo era un poco "pingaja" que ya sabes que en el pueblo significa que, como diría aquel, si se hubiese caído la casa, no me hubiese cogido debajo. ¡Vamos que estaba siempre jugando y pingoneando!, siempre y cuando no fuese la hora de la escuela, que para mi, era sagrada porque me gustaba mucho asistir a las clases. ¡Creo que no hice ni una sola vez novillos! Ahí mis hijos salieron a mi ya que el pequeño no faltó ni un solo día, y el mayor faltó justo los días que se necesitan para recuperarse de una operación de apendicitis, cuando ya tenía catorce años.
Bueno mozona, continuo por aquí dando vueltas a ver qué se cuece. Un besazo

Ya lo creo que me llamaba y recuerdo que no le parecía bien que saliera, pero me las ingeniaba para irme como tu dices de''pingoneo''
después de salir de la escuela y coger la onza de chocolate con pan siempre tenia que ir al (corral) y claro ya no me veía el pelo
a la vuelta a casa pues la reguañina, y la esplicacion que le daba ¡Abuela me he encontrao ¡con la Rosa o la Bienve siempre había alguna
que pagaba el pato, y al dia siguiente si el tiempo era bueno después de la escuela y la merienda me decía hoy al corralón y coje la vainica
ya esta bien de tanto ''ureo''
Señor señor que tiempos ¡A le mocetona un beso
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
A mí no me importaba que mi madre me mandase a hacer vainica, ganchillo o festones pues era, y es una "tarea" que me gustaba mucho. Incluso ahora, de vez en cuando, me atrevo a hacer alguna labor aunque para muchas personas esas cosas no tienen ningún valor; para mí, el resultado es siempre placentero y agradable.
Otro beso para ti y para Juan.