- ¿Ha de ser ahora mismo? -preguntó Palitroque, somnoliento.
La abuela Sarmiento irrumpió en su dormitorio.
-Sí, ahora mismo, o no tendremos nada que comer.
La abuela Sarmiento irrumpió en su dormitorio.
-Sí, ahora mismo, o no tendremos nada que comer.