Científicos del Instituto de Seguridad Industrial, Radiofísica y Medioambiental de la Universidad de Valencia y el Hospital de la Fe, demostraron en el año 2008, que el propóleo puede reducir hasta en un 50% el daño que las radiaciones ionizantes provocan en los cromosomas.
Investigadores de varias universidades valencianas y catalanas, han evaluado en un nuevo estudio el rango óptimo de concentración en el que esta sustancia natural ofrecería una protección máxima para las radiaciones ionizantes sin ser tóxica para las células sanguíneas.
Investigadores de varias universidades valencianas y catalanas, han evaluado en un nuevo estudio el rango óptimo de concentración en el que esta sustancia natural ofrecería una protección máxima para las radiaciones ionizantes sin ser tóxica para las células sanguíneas.
