Compramos energía a futuro

ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: ......

¿Cómo reacionarían nuestros antepasados ante el bombardeo de datos que recibimos cada día? Muchas veces recibimos más de los que podemos asimilar y también a veces, parece que estemos perdiendo algo importante...

Debemos superar el ansia de información. Viviremos más tranquilos.

Puede ocurrir en cualquier momento y en todo lugar, por ejemplo: estamos en una fiesta y alguien menciona el nombre de una celebridad. Asentimos con la cabeza dando a entender que que sabemos de quién se trata, pero la única persona que evoca ese nombre es nuestro dentista...

...
También en nuestra casa sentimos a veces alguna leve depresión, pues no sabemos para qué sirven todos los botones de nuestra videograbadora. Tenemos que transferir una llamada en uno de esos teléfonos ultramodernos, pero ignoramos cómo hacerlo...

...
No nos queda más remedio, a muchos de los que nacimos a mediados del siglo XX sobre todo, o antes, que esperar a que vengan nuestros hijos o nietos a casa y nos solucionen el problema, siempre y cuando no sean como los nietos de Castilleja que, en lugar de ayudarla con estos pequeños-grandes problemas, le esconden toda clase "de trastos supermodernos" para hacerla "rabiar" un poco...

...
Pienso que para funcionar bien en sociedad, nos vemos obligados a asimilar un caudal de conocimientos que va creciendo minuto a minuto...

...
Y tratar de estar al día, puede provocar una "ansiedad de información", una aprensión por la brecha cada vez más ancha entre lo que entendemos y lo que creemos que deberíamos entender...

...
El "Ansia de Información" es el agujero negro entre los datos del conocimiento. Entendérselas con la copiaosa información que nos rodea tal vez sea una verdadera pesadilla si:

-Comentamos a menudo que no estamos al tanto de los acontecimientos.
-Tendemos a pensar que las personas con quienes nos relacionamos saben lo que nosotros ignoramos.
-Tememos o nos avergonzamos confesar: "No lo sé".
-Prestamos demasiada atención a novedades irrelevantes en nuestra vida...

...
Desplegamos una actividad febril para obtener información porque creemos que, cuanto más sepamos, mayor será nuestro poder...

...
Pero a medida que la tecnología, a través de la cual se comunica esa información, se vuelve más accesible, y la posibilidad de procesarla y asimilarla toda se vuelve más remota...

...
Es como si nos halláramos al final de una línea de montaje que nos hiciera llegar datos a velocidad alarmante, y no hubiera un botón para interrumpirla...

...
Tal exceso ha dado como resultado una confusión importantísima entre los datos y la auténtica información; entre los hechos y los conocimientos...

...
Según el diccionario, información es "un conjunto de conocimientos útiles". De acuerdo con esta definición, gran parte de lo que suele etiquetarse como información es sólo una serie de datos escuetos...

...
Hasta que hayamos hecho esta distinción no se mitigará nuestra ansiedad por obtener datos. Para defendernos de esta "artillería" hemos de adoptar algunas tácticas y actitudes, como por ejemplo: Aceptemos que hay muchas cosas que no entenderemos...

...
A muchos se nos ha enseñado, desde pequeños, por lo menos en forma implícita, que no debemos reconocer nuestra ignorancia. Casi todos hemos oído esta advertencia: "Es mejor quedarse con la boca cerrada y parecer tonto, que abrirla y disipar toda clase de duda al respecto"...
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
...
Según los entendidos, esto se relaciona con cierta inseguridad casi universal, por la que nos sentimos seres humanos inferiores si no entendemos algo. En consecuencia, vivimos con el temor de que nuestra ignorancia salga a relucir, y nos pasamos la vida tratando de engañar al mundo...