Estructura de la sociedad
Los días del abuelo, obra de S. Sánchez Barbudo, 1894
En el último tercio del siglo XIX se consolidaron las estructuras de la sociedad clasista:
Una clase dirigente, en la que se incluían los grandes terratenientes, los empresarios industriales, los banqueros y los funcionarios de alto rango.
Unas amplias clases intermedias, en las que existía una gradación económica e incluso de mentalidad. Así, la burguesía acomodada seguía las directrices de la clase dirigente. La pequeña burguesía, aunque pertenecía, junto con la clase obrera, a las capas populares, apoyó generalmente a las clases dominantes y burguesas.
La clase obrera, compuesta por trabajadores independientes y trabajadores por cuenta ajena. Su situación dependía del salario que recibían, siendo conflictiva para el obrero agrícola del sur y para el trabajador eventual de la industria
Los días del abuelo, obra de S. Sánchez Barbudo, 1894
En el último tercio del siglo XIX se consolidaron las estructuras de la sociedad clasista:
Una clase dirigente, en la que se incluían los grandes terratenientes, los empresarios industriales, los banqueros y los funcionarios de alto rango.
Unas amplias clases intermedias, en las que existía una gradación económica e incluso de mentalidad. Así, la burguesía acomodada seguía las directrices de la clase dirigente. La pequeña burguesía, aunque pertenecía, junto con la clase obrera, a las capas populares, apoyó generalmente a las clases dominantes y burguesas.
La clase obrera, compuesta por trabajadores independientes y trabajadores por cuenta ajena. Su situación dependía del salario que recibían, siendo conflictiva para el obrero agrícola del sur y para el trabajador eventual de la industria