Definitivamente, pienso que es la fotografía. Pués ha tardado más de lo normal en quedarse el texto.
Me voy a arriesgar a seguir con los comentarios.
Tordilla y demás foreros: Esta fotografía me trae muy buenos recuerdos, porque uno de los chopos que aparece en primer plano, lo planté yo, con mis propias manos. Corté una vara de otro chopo, afilé uno de los extremos y lo clavé en la linde de la acequia. Al cabo de los años, como veis, ha crecido lo suyo. Por lo tanto estoy muy orgulloso de -mí- árbol. Ha sobrevivido a algún incendio que otro, pues para limpiar las acequias, a veces, queman los costones con el consiguiente riesgo para todo lo que haya plantado en ellos.
Te hacía el comentario Tordilla, de que me habías puesto los dientes largos al hablar de los pepinos y de los tomates de las huertas de Alconchel.
Cuando estoy en el pueblo, solemos darnos, de vez en cuando, largos paseos por los alrededores. En verano, me voy con Teodoro a su huerta, -a veces nos acompañan mi sobrino Kike, Paquito, ó Juan, -el yerno de Artemio, que en P.de.-, y damos una vueltecita para ver cómo van las hortalizas, sobre todo; le damos un vistazo a los tomates y a los pepinos y, como siempre hay alguno maduro, lo arranco de la mata, lo lavo en la acequia y sin más sal ni nada, -no pongo otra palabreja que ponía-, y me lo como, sabéis que tienen un sabor especial, a mata, como decimos en el pueblo.
También comentaba algo sobre la casa rural que tienen pensado hacer en el pueblo y la granja escuela. Hace tiempo hablé con el padre de Bea y se lo dejé caer, pero parece que no lo consideró viable. El comentario se lo hice después de que vino un amigo de Valencia, al pueblo, con su mujer e hija, la niña tenía dos añitos y os podés imaginar la cara de alegría al ver tantos y tan variados animales. Antonio la subió al poney y le dió una vuelta por el arrañal. Su padre, el de la niña, la gravó en el vídeo y me comenta, que de vez en cuando aún se lo pone y la niña sigue disfrutando, viendo los corderos, ovejas, go-rri-nos, gatos, cabras, perdices, -que también tenía-, bueno y todos los animales que normalmente hay en las granjas.
Milagros: También te comentaba, sobre Francisco, el que está en Francia, al que llamamos, -Gabaldón-, que aparte de leer, podían enseñarle sus hijos a escribir algún comentario.
Bueno este no sé si tendré suerte. A ver qué pasa.
Un abrazo a todos.
Eufra7.
Me voy a arriesgar a seguir con los comentarios.
Tordilla y demás foreros: Esta fotografía me trae muy buenos recuerdos, porque uno de los chopos que aparece en primer plano, lo planté yo, con mis propias manos. Corté una vara de otro chopo, afilé uno de los extremos y lo clavé en la linde de la acequia. Al cabo de los años, como veis, ha crecido lo suyo. Por lo tanto estoy muy orgulloso de -mí- árbol. Ha sobrevivido a algún incendio que otro, pues para limpiar las acequias, a veces, queman los costones con el consiguiente riesgo para todo lo que haya plantado en ellos.
Te hacía el comentario Tordilla, de que me habías puesto los dientes largos al hablar de los pepinos y de los tomates de las huertas de Alconchel.
Cuando estoy en el pueblo, solemos darnos, de vez en cuando, largos paseos por los alrededores. En verano, me voy con Teodoro a su huerta, -a veces nos acompañan mi sobrino Kike, Paquito, ó Juan, -el yerno de Artemio, que en P.de.-, y damos una vueltecita para ver cómo van las hortalizas, sobre todo; le damos un vistazo a los tomates y a los pepinos y, como siempre hay alguno maduro, lo arranco de la mata, lo lavo en la acequia y sin más sal ni nada, -no pongo otra palabreja que ponía-, y me lo como, sabéis que tienen un sabor especial, a mata, como decimos en el pueblo.
También comentaba algo sobre la casa rural que tienen pensado hacer en el pueblo y la granja escuela. Hace tiempo hablé con el padre de Bea y se lo dejé caer, pero parece que no lo consideró viable. El comentario se lo hice después de que vino un amigo de Valencia, al pueblo, con su mujer e hija, la niña tenía dos añitos y os podés imaginar la cara de alegría al ver tantos y tan variados animales. Antonio la subió al poney y le dió una vuelta por el arrañal. Su padre, el de la niña, la gravó en el vídeo y me comenta, que de vez en cuando aún se lo pone y la niña sigue disfrutando, viendo los corderos, ovejas, go-rri-nos, gatos, cabras, perdices, -que también tenía-, bueno y todos los animales que normalmente hay en las granjas.
Milagros: También te comentaba, sobre Francisco, el que está en Francia, al que llamamos, -Gabaldón-, que aparte de leer, podían enseñarle sus hijos a escribir algún comentario.
Bueno este no sé si tendré suerte. A ver qué pasa.
Un abrazo a todos.
Eufra7.