3 meses GRATIS

ALCONCHEL DE LA ESTRELLA (Cuenca)

El chocolate de la merienda
Foto enviada por eufra7dos@hotmail.com

—Escucha, muchacho —dijo ella—. Puedo hacerte más rico de lo que jamás soñaste.

El soldado dejó de silbar al acercarse a la vieja. Era tan fea, que estaba seguro de que debía tratarse de una bruja.
La cajita de yesca

Un soldado regresaba a casa de la guerra, silbando una alegre canción, cuando vio a una vieja sentada bajo un gran roble.