Hola Josefita, me alegra que aparezcas por este medio. Pero ya que has puesto algunos nombres sobre los equinos, yo tambien recuerdo el nombre de otro. Un domingo a las ocho de la mañana, tu padre tenía preparado un caballo, tipo - percherón, un pelo no muy bonito, vamos que no se parecía en nada a los que cuidaba tu padre, y le pregunté que nombre tenía, este caballo le vamos ha llamar TOPACIO. Con él emprendí la marcha al Cortijo de Ferrero alli lo dejé. Creo que lo habían traido de Villanueva de Cordoba. El nombre de Topacio nunca se me olvidó. Y un día descubrí que Topacio es un mineral, de color generalmente amarillo, Silicato de alúmina trasparente y con brillo que el pelo del susodicho caballo lo tenía, para que veamos y sepan los jóvenes de ahora, que antes había tambien personas inteligentes. Josefita, dirás que te he contado una historia algo pesada, la verdad que contando historias de la Garganta no se cuando ponerle fín. Creo que tu padre se llamaba ADOLFO, ¿no es así?, lo recuerdo todo perfectamente. Un saludo.-