Quijote podemos hablar de la existencia de una gastronomía popular manchega en tres niveles: Un primer nivel sería el popular y cotidiano, las lentejas, los duelos y quebrantos, la albondiguilla, el palomino, las truchuelas, abadejo o curadillo que de todas estas maneras se llamaba al bacalao-, la "olla con algo más de vaca que carnero", los gazpachos, las migas, los torreznos, el manjar blanco. Un segundo nivel más rico o de días de fiesta (la referencia más clara son los guisos que aparecen en ... (ver texto completo)