24/02/2005|Albacete
José María Barreda ha inaugurado en Albacete la exposición itinerante 'Los últimos olmos ibéricos'
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, inauguró ayer en Albacete la exposición “Los últimos olmos ibéricos” que, financiada por la entidad Caja Madrid y gracias a un convenio de colaboración entre la Consejería de Medio Ambiente y la ONG “Bosques sin Fronteras”, se instalará temporalmente en Castilla-La Mancha recorriendo los municipios de Albacete, Ciudad Real, Talavera de la Reina, Toledo, Illescas, Quintanar, Cuenca, Cañete, Huete, Tarancón, Molina de Aragón, Alcázar de San Juan, Puertollano, Guadalajara y Sigüenza.
A través de esta muestra se pretende dar a conocer la importancia de los olmos, su problemática en España en estos últimos años, su situación actual y las interesantes medidas puestas en marcha durante los quince años de trabajo del equipo investigador español para atajar la enfermedad de la grafiosis.
En ese sentido, José María Barreda ha destacado la sabiduría del catedrático Luis Gil en esta materia, recordando que hace poco tiempo la revista de investigación más prestigiosa del mundo le ha publicado un artículo en el que se anuncia que, en breve, habrá descubierto una vacuna contra la grafiosis que espera sea fundamental para la supervivencia de los olmos.
El presidente del Gobierno castellano-manchego se ha referido al poema de Antonio Machado A un olmo seco como un canto a la resurrección de esta especie, afirmando que, al igual que “a ese olmo le salió una rama verde espero que con la vacuna le salga la esperanza de su supervivencia”.
Mientras, Barreda ha señalado que es un acierto que la Consejería de Medio Ambiente haya colaborado en esta exposición que ayuda a conocer la importancia de los olmos a lo largo de la historia.
“Pedirle uvas y no peras al olmo”
Del mismo modo, el presidente de Castilla-La Mancha ha apuntado que los olmos han colaborado en el desarrollo de la humanidad y en algunos aspectos de la agricultura. De hecho, según ha recordado, la gran expansión de los olmos en la península ibérica se debió a su utilización como soporte de las viñas.
En este punto, José María Barreda se ha referido a una expresión del siglo y de.C., que también figura en El Quijote, como es “no le pidas peras al olmo”, ya que habría que pedirle uvas.
Por otro lado, el presidente ha recordado los grandes olmos que hace años existían en la mayoría de las plazas de los pueblos explicando que se debía a una pragmática de Carlos III que obligó a plantar un árbol delante de los ayuntamientos como símbolo de la ilustración.
La exposición consta de paneles fotográficos, maderas, semillas e instrumentos tradicionales realizados con madera de olmos. Está dividida en cuatro partes: características descriptivas de los olmos, los olmos y la historia de la humanidad, la enfermedad de la grafiosis y acciones del hombre.
Sus autores, Susana Domínguez Lerena, ingeniera técnica forestal y fotógrafa, y Ezequiel Martínez Rodríguez, naturalista y fotógrafo, tienen una amplia experiencia en la realización de exposiciones fotográfica en el campo del medio ambiente. Durante más de dos años han realizado un seguimiento documental y fotográfico del programa español de lucha contra la grafiosis.
Castillamancha.es/Agencia
MEDIO HUMANO
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24/02/2005|Albacete
José María Barreda ha inaugurado en Albacete la exposición itinerante 'Los últimos olmos ibéricos'
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, inauguró ayer en Albacete la exposición “Los últimos olmos ibéricos” que, financiada por la entidad Caja Madrid y gracias a un convenio de colaboración entre la Consejería de Medio Ambiente y la ONG “Bosques sin Fronteras”, se instalará temporalmente en Castilla-La Mancha recorriendo los municipios de Albacete, Ciudad Real, Talavera de la Reina, Toledo, Illescas, Quintanar, Cuenca, Cañete, Huete, Tarancón, Molina de Aragón, Alcázar de San Juan, Puertollano, Guadalajara y Sigüenza.
A través de esta muestra se pretende dar a conocer la importancia de los olmos, su problemática en España en estos últimos años, su situación actual y las interesantes medidas puestas en marcha durante los quince años de trabajo del equipo investigador español para atajar la enfermedad de la grafiosis.
En ese sentido, José María Barreda ha destacado la sabiduría del catedrático Luis Gil en esta materia, recordando que hace poco tiempo la revista de investigación más prestigiosa del mundo le ha publicado un artículo en el que se anuncia que, en breve, habrá descubierto una vacuna contra la grafiosis que espera sea fundamental para la supervivencia de los olmos.
El presidente del Gobierno castellano-manchego se ha referido al poema de Antonio Machado A un olmo seco como un canto a la resurrección de esta especie, afirmando que, al igual que “a ese olmo le salió una rama verde espero que con la vacuna le salga la esperanza de su supervivencia”.
Mientras, Barreda ha señalado que es un acierto que la Consejería de Medio Ambiente haya colaborado en esta exposición que ayuda a conocer la importancia de los olmos a lo largo de la historia.
“Pedirle uvas y no peras al olmo”
Del mismo modo, el presidente de Castilla-La Mancha ha apuntado que los olmos han colaborado en el desarrollo de la humanidad y en algunos aspectos de la agricultura. De hecho, según ha recordado, la gran expansión de los olmos en la península ibérica se debió a su utilización como soporte de las viñas.
En este punto, José María Barreda se ha referido a una expresión del siglo y de.C., que también figura en El Quijote, como es “no le pidas peras al olmo”, ya que habría que pedirle uvas.
Por otro lado, el presidente ha recordado los grandes olmos que hace años existían en la mayoría de las plazas de los pueblos explicando que se debía a una pragmática de Carlos III que obligó a plantar un árbol delante de los ayuntamientos como símbolo de la ilustración.
La exposición consta de paneles fotográficos, maderas, semillas e instrumentos tradicionales realizados con madera de olmos. Está dividida en cuatro partes: características descriptivas de los olmos, los olmos y la historia de la humanidad, la enfermedad de la grafiosis y acciones del hombre.
Sus autores, Susana Domínguez Lerena, ingeniera técnica forestal y fotógrafa, y Ezequiel Martínez Rodríguez, naturalista y fotógrafo, tienen una amplia experiencia en la realización de exposiciones fotográfica en el campo del medio ambiente. Durante más de dos años han realizado un seguimiento documental y fotográfico del programa español de lucha contra la grafiosis.
Castillamancha.es/Agencia.
José María Barreda ha inaugurado en Albacete la exposición itinerante 'Los últimos olmos ibéricos'
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, inauguró ayer en Albacete la exposición “Los últimos olmos ibéricos” que, financiada por la entidad Caja Madrid y gracias a un convenio de colaboración entre la Consejería de Medio Ambiente y la ONG “Bosques sin Fronteras”, se instalará temporalmente en Castilla-La Mancha recorriendo los municipios de Albacete, Ciudad Real, Talavera de la Reina, Toledo, Illescas, Quintanar, Cuenca, Cañete, Huete, Tarancón, Molina de Aragón, Alcázar de San Juan, Puertollano, Guadalajara y Sigüenza.
A través de esta muestra se pretende dar a conocer la importancia de los olmos, su problemática en España en estos últimos años, su situación actual y las interesantes medidas puestas en marcha durante los quince años de trabajo del equipo investigador español para atajar la enfermedad de la grafiosis.
En ese sentido, José María Barreda ha destacado la sabiduría del catedrático Luis Gil en esta materia, recordando que hace poco tiempo la revista de investigación más prestigiosa del mundo le ha publicado un artículo en el que se anuncia que, en breve, habrá descubierto una vacuna contra la grafiosis que espera sea fundamental para la supervivencia de los olmos.
El presidente del Gobierno castellano-manchego se ha referido al poema de Antonio Machado A un olmo seco como un canto a la resurrección de esta especie, afirmando que, al igual que “a ese olmo le salió una rama verde espero que con la vacuna le salga la esperanza de su supervivencia”.
Mientras, Barreda ha señalado que es un acierto que la Consejería de Medio Ambiente haya colaborado en esta exposición que ayuda a conocer la importancia de los olmos a lo largo de la historia.
“Pedirle uvas y no peras al olmo”
Del mismo modo, el presidente de Castilla-La Mancha ha apuntado que los olmos han colaborado en el desarrollo de la humanidad y en algunos aspectos de la agricultura. De hecho, según ha recordado, la gran expansión de los olmos en la península ibérica se debió a su utilización como soporte de las viñas.
En este punto, José María Barreda se ha referido a una expresión del siglo y de.C., que también figura en El Quijote, como es “no le pidas peras al olmo”, ya que habría que pedirle uvas.
Por otro lado, el presidente ha recordado los grandes olmos que hace años existían en la mayoría de las plazas de los pueblos explicando que se debía a una pragmática de Carlos III que obligó a plantar un árbol delante de los ayuntamientos como símbolo de la ilustración.
La exposición consta de paneles fotográficos, maderas, semillas e instrumentos tradicionales realizados con madera de olmos. Está dividida en cuatro partes: características descriptivas de los olmos, los olmos y la historia de la humanidad, la enfermedad de la grafiosis y acciones del hombre.
Sus autores, Susana Domínguez Lerena, ingeniera técnica forestal y fotógrafa, y Ezequiel Martínez Rodríguez, naturalista y fotógrafo, tienen una amplia experiencia en la realización de exposiciones fotográfica en el campo del medio ambiente. Durante más de dos años han realizado un seguimiento documental y fotográfico del programa español de lucha contra la grafiosis.
Castillamancha.es/Agencia
MEDIO HUMANO
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24/02/2005|Albacete
José María Barreda ha inaugurado en Albacete la exposición itinerante 'Los últimos olmos ibéricos'
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, inauguró ayer en Albacete la exposición “Los últimos olmos ibéricos” que, financiada por la entidad Caja Madrid y gracias a un convenio de colaboración entre la Consejería de Medio Ambiente y la ONG “Bosques sin Fronteras”, se instalará temporalmente en Castilla-La Mancha recorriendo los municipios de Albacete, Ciudad Real, Talavera de la Reina, Toledo, Illescas, Quintanar, Cuenca, Cañete, Huete, Tarancón, Molina de Aragón, Alcázar de San Juan, Puertollano, Guadalajara y Sigüenza.
A través de esta muestra se pretende dar a conocer la importancia de los olmos, su problemática en España en estos últimos años, su situación actual y las interesantes medidas puestas en marcha durante los quince años de trabajo del equipo investigador español para atajar la enfermedad de la grafiosis.
En ese sentido, José María Barreda ha destacado la sabiduría del catedrático Luis Gil en esta materia, recordando que hace poco tiempo la revista de investigación más prestigiosa del mundo le ha publicado un artículo en el que se anuncia que, en breve, habrá descubierto una vacuna contra la grafiosis que espera sea fundamental para la supervivencia de los olmos.
El presidente del Gobierno castellano-manchego se ha referido al poema de Antonio Machado A un olmo seco como un canto a la resurrección de esta especie, afirmando que, al igual que “a ese olmo le salió una rama verde espero que con la vacuna le salga la esperanza de su supervivencia”.
Mientras, Barreda ha señalado que es un acierto que la Consejería de Medio Ambiente haya colaborado en esta exposición que ayuda a conocer la importancia de los olmos a lo largo de la historia.
“Pedirle uvas y no peras al olmo”
Del mismo modo, el presidente de Castilla-La Mancha ha apuntado que los olmos han colaborado en el desarrollo de la humanidad y en algunos aspectos de la agricultura. De hecho, según ha recordado, la gran expansión de los olmos en la península ibérica se debió a su utilización como soporte de las viñas.
En este punto, José María Barreda se ha referido a una expresión del siglo y de.C., que también figura en El Quijote, como es “no le pidas peras al olmo”, ya que habría que pedirle uvas.
Por otro lado, el presidente ha recordado los grandes olmos que hace años existían en la mayoría de las plazas de los pueblos explicando que se debía a una pragmática de Carlos III que obligó a plantar un árbol delante de los ayuntamientos como símbolo de la ilustración.
La exposición consta de paneles fotográficos, maderas, semillas e instrumentos tradicionales realizados con madera de olmos. Está dividida en cuatro partes: características descriptivas de los olmos, los olmos y la historia de la humanidad, la enfermedad de la grafiosis y acciones del hombre.
Sus autores, Susana Domínguez Lerena, ingeniera técnica forestal y fotógrafa, y Ezequiel Martínez Rodríguez, naturalista y fotógrafo, tienen una amplia experiencia en la realización de exposiciones fotográfica en el campo del medio ambiente. Durante más de dos años han realizado un seguimiento documental y fotográfico del programa español de lucha contra la grafiosis.
Castillamancha.es/Agencia.