El madroño está en plena floración y con alguno de sus
frutos listos para
comer.
Se cuela la hoja de algún acebo entre las hojas del madroño.
Hay varios madroños entre las encinas de la margen derecha der
río Retumbia (en el curso inferior del arroyo), pero la mancha mayor del madroñal se concentra en su margen izquierda, en las faldas inferiores del
Monte La Viorna, en la encrucijada de
caminos que unen este
pueblo con el de Maredes y la villa de
Potes.