ONTANEDA: Gabon "hermanos"...

Gabon "hermanos"
Mi involuntaria experiencia en Ontaneda (como a cualquier otro niñx de la época) representa una de las primeras fases de mi vida y ahora que escribo representa también una de mis últimas fases de lo que me quede de vida.
Estereotipos aparte, hoy creo que fue para mi un antes y un después en mi vida sin saberlo; el lugar era una factoría de personas por encargo con un label de calidad a medida de sus bienhechores como el Banco de Santander, familias poderosas adineradas, el Vaticano, etc. y si salías con algún "defecto" te desechaban y punto.
El afecto humano brillaba por su ausencia o se sustituía por Imágenes religiosas o siniestras e íntimas direcciones espirituales "amén de lo que cada uno buscara por su cuenta", pero no todo era malo: La disciplina, la fuerza de voluntad, el orden, la higiene, la pertenencia al grupo por encima de la individualidad, el espíritu de sacrificio, etc. son valores que tienen su recompensa
Nunca sufrí malos tratos físicos salvo leves castigos como dormir en el pasillo sin colchón o sin almohada, psicológicos como aislarte temporalmente del grupo (solíamos estar separados en tres grupos: hermanos pequeños, hermanos medianos y hermanos mayores) pero dentro de las mismas instalaciones.
Lo de que nos hiciéramos responsables de lavar nuestros calcetines todos los días y llevarlos en la mano con la cinta de color correspondiente, creo que no lo olvidaré en toda mi vida, y lo más traumático que me marcó para siempre fue el fatídico y angustioso
día en que me avisaron de que me iba para mi casa y no volvería nunca.
Hoy, a mis 71 años TODAVÍA SIGO SIN SABER PORQUE
En clase teníamos dos grupos: El acorazado Bismarck y los del Titanic
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Buenas noches a todos los participantes en este foro.
No dices quién eres pero por tu edad seguro que fuimos compañeros. Soy Jaime Blanco y llegué a Ontaneda en julio de 1962.
Buen análisis de lo que supuso para muchos la estancia entre los muros del viejo hotel de Ontaneda convertido en seminario o apostólica.
Todos, creo, fuimos de alguna forma violentados profundamente en nuestras cabezas que fueron taladradas con ideas peregrinas y siniestras pero bien dirigidas a las entrañas de nuestro ... (ver texto completo)