Qué bonita iniciativa han tenido mi hermana Cionina y su hija María con los profesionales de la Residencia San José del grupo Vitalitas en el Polígono de Morero en Guarnizo donde mi hermano Antonio pasó los últimos tres años y ocho meses, al remitirle una carta entrañable de agradecimiento, fijaros si han agradecido el detalle de mi hermana y sobrina que les han respondido que la piensan publicar en la residencia para conocimiento de todos.
Creo que estos gestos deben abundar, pues siempre nos quejamos de lo negativo y pocas veces reconocemos el trabajo bien hecho que para éstos profesionales es de vital importancia y gran motivación. Hay trabajos que exigen vocación por encima de la profesionalidad y éste es uno de ellos donde hay que remarcar su humanidad, gracias a la cual hacen más dulce la vida a los que están viviendo su tramo final, que después de la larga trayectoria de toda una vida bien merecido tienen que profesionales así les obsequien con ese trato digno y entrañable y por ello es muy sano reconocérselo cuando así se siente.
¡Bien hecho familia!, aplaudo vuestro gesto, un beso.
Creo que estos gestos deben abundar, pues siempre nos quejamos de lo negativo y pocas veces reconocemos el trabajo bien hecho que para éstos profesionales es de vital importancia y gran motivación. Hay trabajos que exigen vocación por encima de la profesionalidad y éste es uno de ellos donde hay que remarcar su humanidad, gracias a la cual hacen más dulce la vida a los que están viviendo su tramo final, que después de la larga trayectoria de toda una vida bien merecido tienen que profesionales así les obsequien con ese trato digno y entrañable y por ello es muy sano reconocérselo cuando así se siente.
¡Bien hecho familia!, aplaudo vuestro gesto, un beso.