La Virgen del Rosario , Patrona de Valle de Guerra
Las fiestas de la Patrona son en el mes de octubre.
La noche de los fuegos se desarrolla en la plaza la escenificación de la Librea
La escenificación de la Librea de Valle de Guerra, es un acto cultural, tipo auto sacramental, fuertemente arraigado en la cultura y folclore popular, que viene escenificándose desde hace casi tres siglos; y que se ha convertido en tradición y símbolo de identidad de la cultura representativa del pueblo, inspirada en la histórica Batalla de Lepanto, acontecida en 1571 en el Golfo de mismo nombre, entre una poderosa flota naval del Imperio Turco y la armada de La Liga Santa, constituida a instancias del Papa Pío V, por soldados y navíos de España, Estados Pontificios, y Venecia, con el fin de frenar la expansión del Imperio Turco que amenazaba peligrosamente a Europa Occidental y Norte de áfrica.
Si bien se sitúa el comienzo de las representaciones de La Librea en 1720, coincidiendo con la fundación de la ermita de Ntra. Sra. Del Rosario, hay datos suficientes para creer que ésta se representaba ya desde comienzos del siglo XVII, según diferentes historiadores, que sitúan las representaciones de "la naval" en casi todos los pueblos de la comarca en estas fechas cuando aún no existían parroquias.
En la actualidad, son conocidas las Libreas de Barlovento, en La Palma, Tegueste, El Palmar de Buenavista, y Valle de Guerra, en Tenerife. Pero sólo las Libreas de Barlovento y Valle de Guerra, están referenciadas en La Batalla de Lepanto.
En Valle de Guerra La Librea se ha representado casi de manera ininterrumpida, con la excepción de los años de la Guerra Civil Española, y el paréntesis inexplicable de 1971 a 1982, año este último en el que el acto escénico da un importante avance, reflejado también en el texto, pues se sitúan los elementos en su contexto natural ( la batalla ocurre entre dos barcos que simulan las flotas cristiana y turca, y no entre un barco y un castillo como en algunas ocasiones con anterioridad se realizó), y el texto se desarrolló de forma amplia, dando participación a los soldados ( no sólo a los capitanes como antaño), e incluyendo una introducción histórica, contada por los personajes implicados en la gesta ( el Rey Felipe II de España, El Papa Pío V, El Dux Veneciano, y Miguel de Cervantes como soldado que fue de esta batalla).
Son muchas las referencias bibliográficas sobre La Librea de Valle de Guerra. Podemos citar diferentes artículos publicados en la prensa de Tenerife; las referencias realizadas por María Victoria Hernández en la publicación "La Batalla de Lepanto. Moros y Cristianos en Barlovento, La Palma" (1997); la que hace María ángeles Sánchez en " Fiestas Populares. España Día a Día" (1998); las reseñas de Manuel Hernández González en "Tradiciones de Tegueste. La Librea, Los Barcos y La Danza de Las Flores" (1999); y de manera especialmente destacada la publicación de Aleth González Cairós en el libro " La Librea, Valle de Guerra. Un estudio antropológico sobre el teatro popular canario" 1997).
Unas referencias sitúan el acto en el contexto de las luchas entre moros y cristianos, y otras lo consideran un acto sacramental en el que utilizando como pretexto un acontecimiento histórico, se pretende resaltar el aspecto religioso, pues desde esta perspectiva se considera que la victoria de la armada de la Liga Santa sobre la flota naval turca, fue obra pericial de un experto marino católico ( Juan de Austria), y la intercesión de la Virgen del Rosario. Pero en ambas interpretaciones quedan explicadas las posiciones del " bien y del mal", del "bueno y del malo", aspecto éste también reflejado en La Librea de El Palmar, (aunque en este caso nada tenga que ver con acontecimientos históricos concretos, ni navales), y en La Librea de Tegueste que sí utiliza la expresión naval.
El sábado más próximo al día 7 de octubre (festividad de Ntra. Sra. Del Rosario), de cada año, Valle de Guerra y sus habitantes abren las puertas, receptivos, hospitalarios, a quienes desde cualquier lugar se desplazan a contemplar uno de los escasos vestigios que aún hoy se conservan, de La Librea en la Batalla de Lepanto.
Las fiestas de la Patrona son en el mes de octubre.
La noche de los fuegos se desarrolla en la plaza la escenificación de la Librea
La escenificación de la Librea de Valle de Guerra, es un acto cultural, tipo auto sacramental, fuertemente arraigado en la cultura y folclore popular, que viene escenificándose desde hace casi tres siglos; y que se ha convertido en tradición y símbolo de identidad de la cultura representativa del pueblo, inspirada en la histórica Batalla de Lepanto, acontecida en 1571 en el Golfo de mismo nombre, entre una poderosa flota naval del Imperio Turco y la armada de La Liga Santa, constituida a instancias del Papa Pío V, por soldados y navíos de España, Estados Pontificios, y Venecia, con el fin de frenar la expansión del Imperio Turco que amenazaba peligrosamente a Europa Occidental y Norte de áfrica.
Si bien se sitúa el comienzo de las representaciones de La Librea en 1720, coincidiendo con la fundación de la ermita de Ntra. Sra. Del Rosario, hay datos suficientes para creer que ésta se representaba ya desde comienzos del siglo XVII, según diferentes historiadores, que sitúan las representaciones de "la naval" en casi todos los pueblos de la comarca en estas fechas cuando aún no existían parroquias.
En la actualidad, son conocidas las Libreas de Barlovento, en La Palma, Tegueste, El Palmar de Buenavista, y Valle de Guerra, en Tenerife. Pero sólo las Libreas de Barlovento y Valle de Guerra, están referenciadas en La Batalla de Lepanto.
En Valle de Guerra La Librea se ha representado casi de manera ininterrumpida, con la excepción de los años de la Guerra Civil Española, y el paréntesis inexplicable de 1971 a 1982, año este último en el que el acto escénico da un importante avance, reflejado también en el texto, pues se sitúan los elementos en su contexto natural ( la batalla ocurre entre dos barcos que simulan las flotas cristiana y turca, y no entre un barco y un castillo como en algunas ocasiones con anterioridad se realizó), y el texto se desarrolló de forma amplia, dando participación a los soldados ( no sólo a los capitanes como antaño), e incluyendo una introducción histórica, contada por los personajes implicados en la gesta ( el Rey Felipe II de España, El Papa Pío V, El Dux Veneciano, y Miguel de Cervantes como soldado que fue de esta batalla).
Son muchas las referencias bibliográficas sobre La Librea de Valle de Guerra. Podemos citar diferentes artículos publicados en la prensa de Tenerife; las referencias realizadas por María Victoria Hernández en la publicación "La Batalla de Lepanto. Moros y Cristianos en Barlovento, La Palma" (1997); la que hace María ángeles Sánchez en " Fiestas Populares. España Día a Día" (1998); las reseñas de Manuel Hernández González en "Tradiciones de Tegueste. La Librea, Los Barcos y La Danza de Las Flores" (1999); y de manera especialmente destacada la publicación de Aleth González Cairós en el libro " La Librea, Valle de Guerra. Un estudio antropológico sobre el teatro popular canario" 1997).
Unas referencias sitúan el acto en el contexto de las luchas entre moros y cristianos, y otras lo consideran un acto sacramental en el que utilizando como pretexto un acontecimiento histórico, se pretende resaltar el aspecto religioso, pues desde esta perspectiva se considera que la victoria de la armada de la Liga Santa sobre la flota naval turca, fue obra pericial de un experto marino católico ( Juan de Austria), y la intercesión de la Virgen del Rosario. Pero en ambas interpretaciones quedan explicadas las posiciones del " bien y del mal", del "bueno y del malo", aspecto éste también reflejado en La Librea de El Palmar, (aunque en este caso nada tenga que ver con acontecimientos históricos concretos, ni navales), y en La Librea de Tegueste que sí utiliza la expresión naval.
El sábado más próximo al día 7 de octubre (festividad de Ntra. Sra. Del Rosario), de cada año, Valle de Guerra y sus habitantes abren las puertas, receptivos, hospitalarios, a quienes desde cualquier lugar se desplazan a contemplar uno de los escasos vestigios que aún hoy se conservan, de La Librea en la Batalla de Lepanto.
