Según informes del Instituto Geológico y Minero de
España, recibe 4,9 hectómetros cúbicos de
lluvia al año, 0,1 de retorno de riego y 0,2 de infiltraciones de
agua residual. Las salidas por bombeo son de 6,7 hectómetros cúbicos anuales, pero se llevó a cabo un proyecto siguiendo el Plan Hidrológico Balear para su reducción.