hola Dana, como tú bien dices, esos momentos de tranquilidad en un contexto de himno natural, como es el susurro del riachuelo, el canto del pájaro o su revoloteo en la rama del árbol, su canto etc.. es, en nuestros dias, un bien muy preciado. Son momentos de distensión y sosiego, frente al trajineo diario y el mundanal ruido. Una buena terapia para combatir el strés y el desenfreno de cada dia con su ritmo trepidante. A disfrutar. Un abrazo para ti y un saludo a todos los de Ujo allá donde se encuentren. Puente