Efectivamente, Maltes, que Somalia es un pais a la deriva, pero eso no es razón, para que se haga lo que se está haciendo. Según el grupo de Trabajo de Alta Mar (HSTF su sigla en inglés) en 2005 más de 800 barcos pesqueros operaban al mismo tiempo en aguas de Somalia, aprovechándose de la incapacidad del pais de vigilar y controlar sus propias aguas y zonas de pesca. Un coro de paises que damanda endurecer la accion internacional por invadir y tomar el control de las aguas somalíes. El Consejo de Seguridad de la ONU (algunos de cuyos miembros pueden tener muchos motivos ocultos para proteger indirectamente a sus flotas pesqueras ilegales en aguas somalíes) aprobó las resoluciones 1816 y1838. Durante años, las tentativas realizadas para controlar la pirateria en los mares del mundo a través de resoluciones de la ONU no pudieron aprobarse, en gran parte porque las naciones miembros sentían que tales acuerdos afectarian a su soberania y seguridad. Los paises son poco proclives a ceder el control y patrullaje de sus propias aguas. Las resoluciones 1816 y 1838 de la ONU fueron acordadas para aplicarse solamente en Somalia, un pais que no tiene ninguna representacion en la Naciones Unidas con fuerza para exigir enmiendas destinadas a proteger su soberania. Dichas resoluciones no mencionan la pesca ilegal ni a los peligros de la descarga de basura. ¿Esperábamos que los somalíes hambrientos permanezcan pasivamente en sus playas, remando entre nuestra basura nuclear, y nos observen cómo les arrebatamos sus peces para comérnoslos en restaurantes de Londres, Paris, Madrid y Roma?. No hemos actuado contra esos crímenes. Pero cuando algunos pescadores, respondieron interrumpiendo el tránsito por el corredor marítimo del 20% del suminsitro de petróleo del mundo comenzamos a chillar sobre esta "maldad". Si realmente queremos ocuparnos de la pirateria, necesitamos extirpar la raiz de la causa-nuestros crimenes-antes de enviar a las cañoneras a despejar la ruta de criminales somalíes.
