RADIO PARPAYUELA
MONÓLOGOS
DIVORCIOS NAVIDEÑOS
Según un estudio, el día del año en el que más separaciones y divorcios se producen el el siete de enero, debido al estrés de la Navidad. Hay un término que es <<saturación convivencial>>. Una manera fina de decir que estás hasta los huevos. Es << ¿Tienes fuego?>> << ¡Déjame en paz!>> Estas loc@ de lo que has convivido.
La Navidad ha sido fuente de tensiones entre parejas desde hace milenios. Miren el Belén: se nota que san José y la Virgen están de mal rollo. No me extraña. Tú imagínate que tu mujer tiene un niño que no es tuyo y que te ha explicado:
<<Noooo, es que vino una paloma y me concibió, mira.>> Y tú dices: <<Joder con la paloma.>> Ya miras las palomas de otra manera, ¿no? A ver si le ves la... Y encima de que no es tu hijo, aparecen tres tios, uno negro, que no conoces, a traerle regalos. Y tú le dices a tu mujer: <<María, tenemos que hablar.>>
<<Nooo, la paloma.>> << No, la paloma ya la he integrado, pero María, estos señores ¿quienes son?>>...<<Eh... unos reyes.>> <<Y ¿cómo saben lo del niño?>>
<<Porque... son Reyes Magos...>> Qué son ¿Tamariz? Dice: <<No, han seguido una estrella.>> Total, se va liando, se va liando, hasta que san José dice:
<< ¿Qué me estás escondiendo María?.>>
Aunque el divorcio navideño se ve venir un poco. Te das cuenta de que te van a dejar porque tu pareja en Nochevieja no te pela la uva, en las campanadas te escupe las pepitas a la cara y cuando toca besarse, se besa con tu cuñad@.
Otra manera de darte cuenta es cuando ella te dice: << Cariño, te quiero>>, y miras el calendario y es el Día de los Inocentes.
Es normal que haya tensión. Sobre todo en Reyes. Tú estás esperando a que lleguen tres extranjeros a casa que no sabes por dónde van a entrar, y te acuerdas de José Luis Moreno. Y como vea a un rey con un hacha.... me piro, ¿eh?...
Hasta luego.....
Hasta luego.....
MONÓLOGOS
DIVORCIOS NAVIDEÑOS
Según un estudio, el día del año en el que más separaciones y divorcios se producen el el siete de enero, debido al estrés de la Navidad. Hay un término que es <<saturación convivencial>>. Una manera fina de decir que estás hasta los huevos. Es << ¿Tienes fuego?>> << ¡Déjame en paz!>> Estas loc@ de lo que has convivido.
La Navidad ha sido fuente de tensiones entre parejas desde hace milenios. Miren el Belén: se nota que san José y la Virgen están de mal rollo. No me extraña. Tú imagínate que tu mujer tiene un niño que no es tuyo y que te ha explicado:
<<Noooo, es que vino una paloma y me concibió, mira.>> Y tú dices: <<Joder con la paloma.>> Ya miras las palomas de otra manera, ¿no? A ver si le ves la... Y encima de que no es tu hijo, aparecen tres tios, uno negro, que no conoces, a traerle regalos. Y tú le dices a tu mujer: <<María, tenemos que hablar.>>
<<Nooo, la paloma.>> << No, la paloma ya la he integrado, pero María, estos señores ¿quienes son?>>...<<Eh... unos reyes.>> <<Y ¿cómo saben lo del niño?>>
<<Porque... son Reyes Magos...>> Qué son ¿Tamariz? Dice: <<No, han seguido una estrella.>> Total, se va liando, se va liando, hasta que san José dice:
<< ¿Qué me estás escondiendo María?.>>
Aunque el divorcio navideño se ve venir un poco. Te das cuenta de que te van a dejar porque tu pareja en Nochevieja no te pela la uva, en las campanadas te escupe las pepitas a la cara y cuando toca besarse, se besa con tu cuñad@.
Otra manera de darte cuenta es cuando ella te dice: << Cariño, te quiero>>, y miras el calendario y es el Día de los Inocentes.
Es normal que haya tensión. Sobre todo en Reyes. Tú estás esperando a que lleguen tres extranjeros a casa que no sabes por dónde van a entrar, y te acuerdas de José Luis Moreno. Y como vea a un rey con un hacha.... me piro, ¿eh?...
Hasta luego.....
Hasta luego.....