FOTO DEL ARCHIVO HISTORICO DE LAVIANA
Aquellos años en los cuales, apenas había
coches y sólo la máquina "La Campurra" que atravesaba la Pola de principio a fín nos acompañaba en nuestros
paseos, con sus chirridos, humaredas y estruendos de aua viejos hierros. La gente se paraba a charlar en medio la
calle, sin preocuparse lo más mínimo si ivan ó venían vehículo alguno.
El
paseo por las aceras de la calle principal ó por el nuevo paseo de la Avenida, constituían el único ocio de los atardeceres lavianenses. Alguna pintina de vino en chigre ó la partida de tute en elbar de cerca
casa, donde se jugaba la media botella de vino ó nada, sólo para pasar el rato.