Deciamos los "antiguos" que el mejor veraneo era quedarse en
Oviedo. La ciudad quedaba vacía de gente, todo el mundo se iba, unos a Gijón, otros a Salinas, Llanes, Villamanín, Pola de Gordón,
Valencia de Don Juan, etc. La ciudad era tuya, tenías montones de sitios donde aparcar, una maravilla. Todo eso se acabó, la gente se va, pero viene otra, casi tan numerosa. La prensa de hoy nos lo recuerda con varias
fotografías: "Yolanda y Miriam observan "La lechera" y no tardan demasiado en subirse en el
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