Un alumno pregunta que le expliquen como era la vida en el colegio en los años anteriores.Bien pues mira yo estuve once años desde 1947 al 1958.Entrábamos a las ocho de la mañana y teníamos misa diaria y por supuesto obligatoria.Tras los estudios y clases, los externos salíamos a la una y media, para volver a las tres.Teníamos las clases, los recreos, el rosario todos los días obligatoriamente en las brigadas correspondientes.Salíamos a las ocho y media de la tarde y solo teníamos vacación los jueves por la tarde y el domingo.
Como formación teníamos al padre "espiritual", el cual se preocupaba exclusivamente de la sexualidad.
Despues estaban las "dignidades", esto eran las medallas y bandas que se entregaban a los mas aplicados y se realizaba en el teatro Principal o en el teatro Argensola, presididas por el padre Rector, acompañado de ilustre antiguos alumnos, como el Alcalde de Zaragoza, etc.La máxima condecoración era el Principe del Colegio y cuando se le colocaba la banda, sonaba el himno nacional.
Es normal y muy plausible, que cuando hicimos las bodas de plata de salida del colegio, nos pidieran perdón por la "educación" recibida.
Sin embargo hay que agradecer que con toda esa presión a la que nos sometían, tambien había almas santas que nos ayudaban en nuestra adolescencia y nos enseñaban a querer a Jesus.
Como formación teníamos al padre "espiritual", el cual se preocupaba exclusivamente de la sexualidad.
Despues estaban las "dignidades", esto eran las medallas y bandas que se entregaban a los mas aplicados y se realizaba en el teatro Principal o en el teatro Argensola, presididas por el padre Rector, acompañado de ilustre antiguos alumnos, como el Alcalde de Zaragoza, etc.La máxima condecoración era el Principe del Colegio y cuando se le colocaba la banda, sonaba el himno nacional.
Es normal y muy plausible, que cuando hicimos las bodas de plata de salida del colegio, nos pidieran perdón por la "educación" recibida.
Sin embargo hay que agradecer que con toda esa presión a la que nos sometían, tambien había almas santas que nos ayudaban en nuestra adolescencia y nos enseñaban a querer a Jesus.
