Una de las iglesias que uno no se puede perder si visita Huesca es la iglesia del antiguo monasterio de Santo Domingo, situada en la confluencia del Coso Bajo y la plaza de Santo Domingo, llamada desde el siglo XX "iglesia de Santo Domingo y San Martín".
El interior sorprende por su decoración. Es una iglesia barroca de planta y escultura jesuítica. La planta es de cruz latina inscrita en un rectángulo, con una sola nave de cinco tramos; crucero no marcado en planta; cabecera recta; capillas laterales ... (ver texto completo)
El interior sorprende por su decoración. Es una iglesia barroca de planta y escultura jesuítica. La planta es de cruz latina inscrita en un rectángulo, con una sola nave de cinco tramos; crucero no marcado en planta; cabecera recta; capillas laterales ... (ver texto completo)